En la extensión natural del año 2018, el periodo de tiempo en el que Abelardo ocupa el banquillo del Alavés, el equipo vitoriano solo sumó un punto menos que el Valencia. Marcelino García Toral es muy consciente de la dificultad que le espera a su equipo en Mendizorroza, feudo que el Alavés, quinto clasificado, ha mantenido invicto con cuatro victorias (dos de ellas ante Villarreal y Madrid) y cuatro empates. La exigencia se redobla ante las bajas de los blanquinegros. No estarán los sancionados Carlos Soler y Gayà, ni tampoco los lesionados Kondogbia, Guedes y Coquelin.

Es tan alta la complejidad del encuentro que Marcelino no se puede permitir el lujo de prescindir de ningún recurso. En la lista de 18 convocados entran, menguados por la fiebres y virus, Kevin Gameiro y Michy Batshuayi. Medio año de inoperancia goleadora de los dos fichajes ha provocado que estén en la rampa de salida de cara al inminente mercado de invierno. Pero Marcelino, hábil estratega, se encargó ayer de proteger a ambos futbolistas. «Chicharito Hernández tiene una gran trayectoria internacional, pero prefiero a nuestros cuatro delanteros». Una proclama directa, con lecturas entre líneas. En primer lugar porque el Valencia necesita activados y motivados a ambos delanteros en el inmediato corto plazo, en un mes con partidos intersemanales entre LaLiga y Copa del Rey. En segundo lugar, la alabanza pública a los dos atacantes, con la idea de que son muy buenos aunque no hayan rendido conforme a su capacidad potencial, es un mensaje al exterior les prestigia de cara a no devaluarles en espera de un destino.

«Deben rendir más»

El técnico asturiano abrió la puerta a la continuidad de Gameiro y Batshuayi y les invitó a den un paso al frente y que no se resignen: «Lo que sabemos es que Kevin y Michy vienen con nosotros a Vitoria queriendo colaborar con el equipo. Me transmiten que se quieren quedar y yo estoy encantado, pero a la vez también les digo que tienen que aumentar el rendimiento para lograr más goles y mejorar los resultados. Mi confianza es máxima, pero deben aumentar el rendimiento mostrado hasta ahora», indicó el preparador. Marcelino profundizó en esa idea y asumió su parte alícuota de responsabilidad al no haber sabido exprimir hasta el momento la capacidad potencial de los dos delanteros: «Queremos futbolistas ambiciosos, ganadores y con la ilusión de mejorar cada día. Tienen que ser conscientes de que su rendimiento debe de mejorar. Pero por supuesto me considero responsable de no haber logrado el máximo rendimiento de cada uno de los jugadores. Es la primera responsabilidad del entrenador, lo asumo absolutamente», señaló un Marcelino que no es partidario de «masificar» la zona atacante con cinco delanteros y que confesó que sería «poco profesional» si evaluaran el futuro de los dos arietes a modo de ultimátum, en función de su rendimiento a corto plazo en las próximas semanas.