Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Lo de Jaume

Lo de Jaume

Qué bien lo de Jaume. No sus partidos, entiéndase, sino lo que demuestra el momento. Ante lo que nos enfrenta. Frente los fallos decisivos en momentos muy visibles, la pulsión de mandarlo al averno. Se nos inflaman las ganas de gestionar un equipo a base de pulsar comandos rápidos. Next. Ya no sirve.

Lo lógico, nos damos a entender, es sentar a Jaume Doménech. Que no es serio tenerlo en esta fase tan decisiva, que ya basta de handicaps y de tener que tirar de épica para acabar levantando, inevitablemente, esta Copa. Una imagen distópica nos amenaza: Jaume encaramado al larguero del Villamarín, como Quique en Chamartín? solo que igual el portero, del «nerviós», se trastabilla.

Jaume es tan sereno en portería como una retroexcavadora. Es el mismo que el de los penaltis de Vitoria y el enaltecimiento de la raíz, solo que sus fallos están suponiendo ahora un castigo excesivo y, ante la templanza de Neto, no parece razonable seguir persistiendo en el riesgo. La peor descripción de Jaume es precisamente el elogio habitual que recibe: hace vestuario. Pequeños eufemismos.

Y sin embargo Marcelino, sin alargar la duda, dijo tras el partido del jueves que Jaume iba a ser el portero de la vuelta. Todo lo que se puede, no conviene. Incluso aquello que parece evidente. Marcelino ha sido bien generoso con Jaume. Le he dado partidos de Liga como una muestra de reconocimiento a una labor de fontanería. Una buena pista respecto a la importancia que le confiere para mantener la fidelidad del grupo.

Se deduce que sus errores penalizan menos que los riesgos de tener a un colectivo hecho trizas. No se logra de la nada mantener cosido un equipo que en circunstancias normales, tras una mitad de temporada horrorosa, se hubiera resquebrajado.

Hay razones que van más allá de la obviedad y del corto plazo. Por eso Jaume, con todo el riesgo, debe jugar el partido de vuelta. Por eso el Valencia necesita que su segundo portero ofrezca muchas más garantías.

Compartir el artículo

stats