«A mí lo de este año no me pasó nunca. Ser superior, merecer ganar tantos partidos y empatar tantos», declaró Marcelino en la sala de prensa tras el empate del Valencia CF contra el Leganés.

«En mi larga trayectoria como entrenador y antes como futbolista nunca antes había vivido esto. Empatar y empatar y empatar. Llegamos muchas veces, el rival muy pocas, y luego los partidos casi siempre acaban en empate. Encajamos un gol de tres acciones peligrosas del rival», explicó el técnico.

«El equipo tiene poca efectividad. Hemos tirado dos palos, el otro día uno. Son cinco centímetros. Tienes que insistir para meter. Si haces cinco ocasiones hay que intentar hacer diez. No tenemos que caer en el desmayo porque el equipo compite y genera juego suficiente para ganar. Los empates nos condicionan una temporada donde el juego y el nivel competitivo del equipo es muy superior», añadió.

Para Marcelino, el mayor error cometido fue «que en el segundo tiempo el rival nos metió gol en un contraataque faltando dos minutos y ganando nosotros 0-1. En el 88 cuando estaba perfectamente dominado el partido tuvimos una pérdida y nos hicieron un contraataque. No percibí ni la más mínima relajación de los jugadores», señaló.

Mauricio Pellegrino, entrenador del Leganés, dio por bueno el punto y consideró que fue justo a juzgar por lo que se vio en el terreno de juego. «Fue un partido difícil de jugar de entrada, es un rival de Champions. Se les puso de cara con el gol y pensaba que al final íbamos a tener posibilidades aunque si nos hacían el segundo, estaba acabado. Queríamos llevar el partido hasta el final», explicó.