El Valencia CF ha dado un paso adelante hacia la Liga de Campeones a costa del Levante UD, que se complica la existencia con el paso de las jornadas. Ahora está a dos puntos del descenso. El equipo de Marcelino, mientras, está a 3 del Sevilla, cuarto, y a 2 del Getafe. Ambos se medirán en la próxima jornada. El derbi de Mestalla fue de color blanco. El Valencia CF dominó todos los aspectos del juego, liderado por su capitán, el imperial Dani Parejo.
Un minuto y medio duró la resistencia granota en Mestalla. El tiempo que tardó Guedes en centrar un balón envenenado al área y desnudar las miserias defensivas del Levante UD. Santi Mina se elevó sobre Luna y remató de cabeza, marcando los tiempos, al segundo palo.
El escenario era perfecto para el ideario de Marcelino: salir a la contra y sacar máximo provecho a la velocidad de Guedes, de delantero junto a Santi Mina por la lesión de Rodrigo. El portugués lanzó un derechazo, con esa extraña postura tan suya, cerca de la cruceta minutos después.
El Levante UD, obligado más que nunca a tener la pelota, se afiló pronto. Se presentó varias veces con peligro en el área de su rival. Neto detuvo el balón un disparo franco de Róger, después de un intento de Jason de plantarse solo ante el portero. El gallego, que el año que viene vestirá de blanco, jugó desde la media punta. Su alineación, ya de por sí, resultó sorprendente, por todo lo que conllevaba su presencia en el campo.
El choque se igualó con el paso de los minutos. El Valencia CF dio un paso atrás y se animó menos de lo esperado a las aventuras ofensivas. La cuestión era tener el partido controlado. Lo estaba para el Valencia CF, principalmente, por la influencia de Parejo en el juego de su equipo. Pleno de confianza, movió al equipo a su antojo, en una exhibición de recursos técnicos y de lectura del juego. Enfrente, Campaña se sintió perdido. Lo mismo que Morales. El jugador más vertical del bando granota estuvo perfectamente vigilado. No entró ni una vez en el área en todo el primer tiempo. Piccini tuvo que se sustituido, lesionado por un golpe en el costado, por Wass. Fue trasladado al hospital para ser examinado a fondo.
Paco López cambió el sistema antes del descanso, como en San Mamés. Situó a Coke en la banda y desplazó a Jason al mediocentro. Un 4-4-2. En la segunda parte volvería al dibujo de 3 centrales, con Róber Pier en la retaguardia.
Daba la sensación de que, apretando un poquito, el Valencia CF marcaría pronto el segundo gol. Al ritmo de Parejo, el equipo de Marcelino gestionaba su ventaja al tran tran, esperando algún hueco por donde dar vuelo a Guedes o a Cheryshev, sus dos futbolistas más veloces sobre el césped.
Cabaco evitó el remate a gol de Santi Mina en una excelente jugada de Guedes. Nadie esperaba entonces el empate del Levante UD, que no llegaba al área de Neto. Hasta que Carlos Soler, en un intento de despeje al saque de un córner, marcó en propia puerta. La alegría granota duró un minuto. En la siguiente acción, Soler se rehizo con un pase sutil a Guedes, que con un disparo formidable, seco, al segundo palo pudo rápidamente al Valencia CF otra vez por delante.
Advertido por el susto, el equipo de Marcelino pisó el acelerador en busca del tercer gol. Ya no más sustos. Soler volvió a ser protagonista: remató a un centro de Cheryshev y el balón rechazado por el poste, fue empujado a gol por Santi Mina en una noche próspera para él.
A 20 minutos para el final, Marcelino dio descanso a Parejo, que retiró del campo coreado por la grada tras otra actuación majestuosa. Soler se fue al centro y Guedes, a la derecha. El Levante UD jugaba con voluntad, pero sin acierto, muy limitado ante un rival tan sobrio. No hubo noticias tampoco de Mayoral, el relevo de Róger, ni de Morales. Muy malas noticias para el conjunto de Paco López.
Mestalla celebró la salida de Kang In Lee en el último cuarto de hora, inédito desde que revolucionó el partido en la remontada de Copa ante el Getafe.
