Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Serial

Historias del Centenario: Boxeo entre Ñito y Jackie Charlton en Leeds

Dos años consecutivos hubo que volver al Reino Unido y en esta ocasión el Leeds United dejó al Valencia en la cuneta de los octavos de final

El temperamental Jack Charlton. levante-emv

El dulce encanto de las copas de Ferias acabó antes de lo previsible. Un equipo ganador dos años consecutivos y finalista en el tercero se presuponía que se mantendría en la elite. Y no fue así. Dos años consecutivos hubo que volver al Reino Unido y en esta ocasión el Leeds United dejó al Valencia en la cuneta de los octavos de final. No fue esta experiencia futbolísticamente y éticamente para recordar. La década de los sesenta, a finales, pese a los desencantos europeos proporcionó otra vez la gran emoción de la conquista de la Copa.

El torneo continental exigió en la temporada 64-65 una eliminatoria previa. Tocó el Royal Leigeois belga, que empató en Valencia a un gol y venció en casa por 3-1. Fue duro golpe admitir tal derrota. En estas eliminatorias apareció el canario Cipriano González Rivera «Ñito» en la portería. Su contratación sirvió para que Palomar, que era de casa y había demostrado su calidad tuviera que salir del club. Fue el héroe del Mestalla en partido de Copa contra el Atlético de Madrid en el viejo Metropolitano.

Ñito fue jugador que creó polémicas porque no respondía a las características de los guardametas tradicionales de la casa. Era algo excéntrico y ello le creó más detractores que defensores. Ñito debutó por lesión de Zamora, quien por cierto continuó toda su carrera valencianista dolido de un tobillo que le obligó a largas recuperaciones, pero de lo que nunca se restableció del todo y nunca se le tuvo en cuenta tal circunstancia.

Ñito ponía de los nervios a los espectadores con sus salidas del marco que compensaba con vuelos acrobáticos propios de un guardameta excepcional. El Valencia se tuvo que enfrentar en la temporada siguiente (65-66) al Leeds United eliminatoria que resultó casi histórica por cuanto sucedió casi al margen de los futbolístico.

Antes de llegar al día de autos, el Valencia eliminó al Hibernian, otra vez Escocia, aunque tuvo que disputar desempate que disputó en Mestalla. Los dos partidos acabaron con 2-0 en favor del local. El partido decisivo lo ganó el Valencia por 3-0. El Basilea, siguiente adversario, no fue gran enemigo. (1-3) y (5-1).

El Leeds estaba liderado por Jackie Charlton, hermano de Bobby, pero muy distante de sus formas. El central era rudo, rústico y rural y en el saque de un córner contra el Valencia, Jackie, que subió al remate, le pegó una patada a Manolo Mestre que éste devolvió. Pero Ñito que no se arredraba ante nadie persiguió al inglés dándole puñetazos. La tangana creció y al final de la misma fueron expulsados Vidagany, Sánchez Lage y Charlton. Del 0-1 se pasó al empate. La vuelta en Mestalla fue infortunada y ganaron los ingleses por 0-1.

Aquí no acabaron los disgustos porque en la campaña siguiente el Valencia eliminó al Nuremberg y al Estrella Roja. Y vuelta la mula al trigo. En octavos, otra vez el Leeds. Nuevo empate a un tanto en la ciudad inglesa y derrota en Mestalla por 0-2.

La repetición de la confrontación contra los ingleses del Leeds en la 66-67, ofreció novedades valencianistas en la alineación titular. Apareció el almazorense Pesudo en la portería y en la delantera para hacer pareja rematadora con Waldo, que con Guillot continuaba siendo el arma más ofensiva del conjunto, fue fichado el guipuzcoano Ansola, delantero centro de formas tradicionales. También la zaga hizo su presentación Tatono. En la precedente eliminatoria con los ingleses también había formado parte del cuadro europeo, Palau, delantero centro de la casa y Totó. En el mismo cupo de debutantes apareció el lateral García Verdugo y el delantero Juan Muñoz Cerdá. Éste llegó a encandilar a Mestalla. Fue autor de dos de los tantos que el Valencia marcó el Hibernian.

Muñoz era extremo habilidoso y genial. Era de los futbolistas que destapa emociones en el terreno de juego. Pero como otros tantos futbolistas que aparecieron con el toque genial comenzó a perder brillantez y el gran sucesor de Gorostiza y Seguí se quedó en la inconsistente mediocridad. Del Valencia pasó al Córdoba y finalmente apareció en Salamanca cuando el club castellano estaba en Tercera. Muñoz fue artífice principal para que el cuadro charro llegar a Primera y se mantuviera entre los mejores. Muñoz fue en ese tiempo un gran director de juego, el alma del conjunto. Tuvo que pasar varios años en segundo plano para que finalmente despertara y mostrara la calidad que había exhibido en sus primeras apariciones.

En aquellas temporadas los entrenadores también mostraban sus preferencias, a veces incomprendidas y una de ellas fue Poli que tardó en granjearse las simpatías de Mestalla. Sin embargo, fue gran jugador de club, de los que se precisan para toda clase de apaños. Siempre cumplidor llegó a la internacionalidad y Balmanya le encomendó contra Inglaterra la misión más sacrificada de la selección: marcar casi al estilo Mangriñán nada menos que a Bobby Charlton. Fue un gran éxito.

Fernando Ansola, natural de Elgoibar, pertenecía al tipo de ariete que había inmortalizado José María Belausteguigoitia. («A mí el pelotón Sabino que los arrollo»). Su facilidad para el remate de cabeza, su fortaleza que no se detenía antes centrales tan duros como el madridista Gregorio Benito, favoreció durante el tiempo que estuvo en el Valencia que Waldo tuviera más facilidad para moverse. Se adjudica al dúo que Waldo, siempre el goleador, se adjudicara el Pichichi con 24 tantos, El brasileño sucedió en esta estirpe de hombres gol a Mundo que lo había sido en los años 40. Ansola, como históricamente ha ocurrido con los guipuzcoanos, acabó jugando en la Real Sociedad. La llegada de éste cortó la progresión a Manuel Palau del Cabanyal que triunfo en los juveniles y en el Mestalla y tras el debut esperanzador por lesión de Waldo se fue difuminando. Fue uno de los artífices del la primer ascenso del Villarreal a Segunda formando con Martínez, Luiche, Causanilles y Serrano.

Palau formó parte del mejor equipo juvenil valenciano. Para la selección nacional fueron llamados Gil Esteve, Vicente Noverges, Cubells García, Cabello García, Francisco Ballester y el vasco José Antonio Urtiaga. Eran años en que se cuidaba la cantera y se tenía seguimiento de todos los clubes regionales. Valencia ganó el campeonato de España de selecciones juveniles con Badía; Cubells, Sancho, Roig; Gil, Canet (Amorós) Cabello, Ballester, Querol, Palau y Noverges. Con parte de esta alineación subió Pasieguito al Sabadell a Primera.

En Mestalla, tras dejar en la cuneta al Nuremberg y Estrella Roja, hubo reedición del enfrentamiento con el Leeds. También esta vez se alzaron con el santo y la limosna. Contra el Estrella Roja hubo datos que no pueden pasar inadvertidos. El entrenador del Estrella Roja era Miljan Miljanic quien años después fue entrenador del Valencia. Sol fue alineado como lateral derecho con Mestre y Vidagany y en la zona delantera aparecía Pepe Claramunt. Vencieron los valencianistas por 1-0 tanto de Ansola y en la vuelta en lugar de Muñoz jugó Guillot. Waldo salvador de muchas batallas se apunto las dos dianas del equipo.

La nueva confrontación con el Leeds tuvo envite esperanzador ya que se empató en Elland Road con un gol histórico marcado por Guillot. Fue el número cien que consiguió el equipo en este campeonato. En Mestalla ganaron los ingleses por un decepcionante 0-2. Esta vez no hubo batalla campal, pero también se perdió. El Leeds ganó la final al Dinamo de Zagreb.

El fútbol valenciano antes de que el Valencia volviera a sumar títulos vivió el hecho trascendental de que por vez primera hubo dos equipos en la llamada División de Honor. Ascendió el Levante de la mano de Quique. En Copa eliminó al Deportivo en desempate jugado en el Bernabéu y a continuación ambos equipos se enfrentaron para dilucidar cuál de los dos ascendía. Rodri, Céspedes, Pedreño, Calpe, Camarasa, Castelló; Vall, Currucale, Vanderley, Domínguez y Serafín lograron la máxima aspiración. Por entonces también el Elche se había aposentado en Primera hazaña que en el viejo Altabix, logró dirigido por César que de Tercera lo llevó a Primera.

El Valencia que pasó por la Liga con altibajos se preparó para volver a poseer la Copa. Era nueva etapa. Tenía que romper con los años de mediocridad liguera que solamente en la Copa de Ferias se habían podido disfrutar de lo que fueron ambiciones pasadas. En casa se habían vivido momentos de esperanza porque el Mestalla crecía hasta el punto de que en Copa venció al Real Madrid por 2-1. Que la Copa volviera a casa estaba tan cerca que sirvió de placebo por la discreta celebración de celebración de las Bodas de Oro.

Compartir el artículo

stats