Paciencia es la consigna que se ha impuesto en el alambicado desenlace del fichaje de Maxi Gómez. Paciencia pide el presidente del Valencia, Anil Murthy, sabedor de las dificultades pero confiado en poder remontar la negociación. Paciencia traslada el Celta, que quiere proteger el acuerdo con el club de Mestalla y reclama al West Ham el pago íntegro y no fraccionado de la cláusula de rescisión de 50 millones. La misma cautela reafirma el agente del futbolista, Jonathan Barnett, que ayer afirmaba que no había nada cerrado, cuando muchas voces daban como cerrado el traspaso al club londinense, y que el Valencia no había arrojado todavía la toalla.

En el relax de jornadas de pesca, asados y paseos a caballo en su Paysandú natal, Maxi Gómez aguarda un final que se prevé rápido. El Valencia aceleró con un ultimátum el pasado domingo unas negociaciones estancadas en el fleco final de los 3 millones de euros en comisiones exigidos por el agente del internacional charrúa. El grupo Stellar se convirtió en el representante de Maxi Gómez al entregarle los 1'5 millones de euros que le correspondían en caso de haber renovado (como no hizo) por el Celta. A esa suma se le añaden otros 1'5 millones por la comisión de la presente operación.

El Valencia no puede competir económicamente con el West Ham, que duplica la oferta de ficha al delantero, pero cuenta a su favor con dos cartas importantes. Primero la voluntad del futbolista de seguir progresando en la Liga española y en un club como el Valencia, con presencia en Liga de Campeones. Después, por el deseo del Celta de aguantar una operación que, de romperse, complicaría el acuerdo para que Santi Mina regrese a Balaídos. En todo caso, el Valencia no hará locuras económicas y tratará de seguir moviéndose en la «inteligencia» que ayer describía Murthy. El presidente destacó que el club está actuando con perspicacia «en un mercado de fichajes locos en el que competimos con clubes dispuestos a pagar cantidades desorbitadas». «El Valencia se mueve con inteligencia», indicó el mandatario singapurés, que puso como ejemplo el fichaje de Jason: «Un gran jugador a coste cero».

«No es fácil, hay que adelantarse a otros clubes y para eso hace falta un gran trabajo», señaló Murthy, que también destacó el objetivo de querer convertirse «en un club sostenible». El presidente también mostró muy satisfecho con el ritmo de renovación de abonos: «Estamos todos muy ilusionados como ha demostrado la campaña de renovación, sólo quedan dos días y el ritmo es muy bueno. Si sigue así no habrá opción para nuevas altas salvo en la renovada Grada Joven en la que, como en el resto del estadio, no hay lugar para los violentos».