Las dificultades de una negociación eterna y por momentos hostil, la compleja fórmula financiera con dinero y jugadores de por medio para sortear un precio de salida demasiado elevado, la persuasión para hacer valer el proyecto deportivo ante la superioridad económica de la concurrencia de la Premier, la mayor cláusula del equipo, solo por detrás de la de Gonçalo Guedes... El esfuerzo del Valencia convierte a Maxi Gómez en el fichaje estrella del proyecto 2019-20. Ayer, al mediodía, con un video de un pasatiempo, el club de Mestalla daba luz al ansiado comunicado oficial. El delantero internacional uruguayo firma hasta 2024 y su cláusula pasa a ser de 140 millones.

En sus primeras declaraciones, ofrecidas por el club, Gómez ya desliza la ambición por la que acabó trasladando a sus agentes que desechasen ofertas más suculentas: «La verdad que estoy muy contento de poder venir al Valencia CF, es un club muy grande. Estoy muy feliz por venir y es algo muy lindo poder jugar Champions, nunca lo hice y siempre lo soñé de chiquito. Estoy muy agradecido al Valencia CF como ya dije y muy contento».

En sus dos primeras temporadas en Mestalla, a Maxi Gómez ya le ha causado sensación cada visita a Mestalla y la particular atmósfera que se respira en los días de partido, que nunca causa indiferencia en los futbolistas visitantes: «Cuando vine a Mestalla con el Celta estaba toda la gente esperando a los jugadores del Valencia CF y fue algo muy lindo, vengo a ayudar mucho al equipo, a poder hacer muchos goles y que vengan cosas muy buenas».

El delantero valencianista disfrutará de unos días de vacaciones antes de incorporarse a la dinámica de un equipo al que ya pudo presentarse en su llegada y al que aportará toda su potencia rematadora: «Lo voy a dar todo como lo hice en todos los clubes que estuve, con mucha fuerza, el otro día pude conocer a los jugadores, sé que faltan muchos todavía pero la verdad que estoy con ganas de empezar ya a entrenar y ponerlo todo en el Valencia CF».

Las cifras finales de la operación son de 14'5 millones de euros (y 1'5 millones en variables), más el traspaso de Santi Mina al Celta, más la cesión por dos temporadas de Jorge Sáenz. Ambos clubes se reservan un 20% de la futura venta de Maxi y Mina. Sobre Sáenz, el Celta tendrá una opción de compra de 7 millones y el Valencia de recompra de 9 millones.