Cuando la palabra recambio sólo se pronunciaba ante la eventual salida de Rodrigo Moreno en estos últimos días de mercado, el infortunio ha vuelto a cebarse con el Valencia CF. Ahora el único sustituto seguro que el club busca en el mercado es el de Cristiano Piccini, lateral derecho que sufrió ayer una grave lesión de rodilla en la sesión táctica a puerta cerrada en el Puchades. Esta mañana en Gijón el doctor Antonio Maestro va a intervenir al futbolista italiano de una fractura de rótula en la pierna derecha que le tendrá lejos de la competición alrededor de cinco meses.

Mientras Cristiano Piccini se encontraba en una clínica de València esperando el resultado de las radiografías para conocer el alcance exacto de la lesión, Mateu Alemany llegó a la Ciudad Deportiva para analizar la situación junto a Marcelino García Toral y el director del Área Técnica, Pablo Longoria. La afectación de la rótula permitía sospechar ya la gravedad de la lesión. Después de destripar las diferentes alternativas en la plantilla -entre ellas, Jason, futbolista al que hace semanas se le comunicó que lo mejor sería encontrar un nuevo destino- y el Valencia Mestalla, el Valencia trabaja en la búsqueda en el mercado de un lateral diestro. La principal condición es que sea comunitario, al estar cubierto el cupo de tres con Paulista, Maxi y Kang In. La segunda es que sea a bajo coste o, preferiblemente, cedido.

Ahora mismo, a cinco días del cierre de mercado, el técnico sólo podría echar mano de modo natural del hombre que se ha afianzado como titular, Daniel Wass. Otros 'arreglos' serían Gabriel Paulista, Jaume Costa a pierna cambiada, Jason si acaba por no salir, o los canteranos Pascu Alba, que jugó en la posición en pretemporada, y Marc Ferris. Tras valorar la situación, con la Liga en marcha y pronto la Champions, la decisión tomada por la dirección deportiva es la de activar la búsqueda de un lateral derecho específico y contrastado. Es lo que necesita el equipo para no perder potencial. No debe olvidarse que hace una semana esa misma banda derecha ya perdió a Carlos Soler, un pilar en el once.

El entrenamiento del Valencia vivió un sobresalto inesperado. Todos se sobrecogieron con el crujido derivado del fuerte impacto en la rodilla padecido por Cristiano Piccini. Los médicos acudieron en su auxilio. El defensa internacional se retorcía de dolor en el césped. Estaba claro que la lesión revestía gravedad, así que pronto se decidió inmovilizar la pierna y llamar a una ambulancia. A las 11:00 horas el vehículo de urgencias salió de la Ciudad Deportiva para trasladar al jugador a 'Eresa'. Los exámenes médicos confirmaron la mala noticia. «El jugador Cristiano Piccini presenta una fractura en la rótula del miembro inferior derecho, según han confirmado las pruebas realizadas este mediodía. El jugador será intervenido en las próximas horas», rezaba el comunicado del club.

Después de las pruebas realizadas, la ambulancia trasladó a Piccini y su esposa a casa, en una conocida urbanización de Rocafort, para descansar unas horas. A las siete de la tarde volaron, con destino a Gijón, en compañía de Pascual Casañ, jefe de los servicios médicos del Valencia CF, y del doctor Maestro, reconocido traumatólogo que desde la etapa de Marcelino trabaja con el primer equipo blanquinegro. El tiempo estimado de recuperación puede oscilar de cuatro meses y medio a seis, en función de cómo evolucione la rótula tras la cirugía y la fortaleza física de Piccini, eso sí, uno de los jugadores más poderosos en este aspecto de la plantilla.

Soler no se opera

Precisamente, el doctor Antonio Maestro estuvo ayer en València, razón por la que se valoró la opción de operar al jugador italiano -estaba pre-seleccionado con la azzurra- en València. El motivo de la visita de Maestro a Paterna fue supervisar el estado del tobillo de Carlos Soler, quien no podrá jugar hasta octubre. Por ahora, todo va bien y el quirófano queda descartado para el '8'.