Albert Celades reunió a sus jugadores antes del entrenamiento para charlar con ellos después del doloroso 0-3 del Ajax de Amsterdam en Champions League. El técnico se dirigió a sus futbolistas sobre el césped de la ciudad deportiva de Paterna para lanzar dos mensajes. El primero, de autocrítica. Hay que ser más contundentes en las áreas y mejorar en eficacia defensiva y efectividad ofensiva. El segundo, para levantar la moral del grupo después del excesivo castigo de los holandes a los ojos de toda Europa. Celades entiende que, más allá de los errores, se hicieron muchas cosas bien sobre todo en la primera parte y están en el camino para que llegue la ansiada victoria en Mestalla.

Contra el Alavés no se puede escapar. Portería a cero.Celades puso el foco en la efectividad del Ajax cara a puerta como clave para explicar la abultada derrota del miércoles. El técnico no dio tanta importancia a los goles encajados. «No hemos recibido tantas ocasiones, no era un asedio, lo que pasa es que cada vez que llegaban casi era gol. En otros partidos recibimos más ocasiones». El Valencia se ha convertido en un equipo fragil en defensa que recibe goles con demasiada facilidad

y ese es el verdadero problema ahora mismo. Desde dentro se tiene la seguridad de que los goles van a llegar. Más dudas generan los desajustes defensivos que se están produciendo especialmente en Mestalla y que Celades de momento no está sabiendo atajar. No es casualidad que el equipo esté defendiendo mejor a domicilio. Ni tampoco que las dos únicas victorias de Celades se hayan producido en Stamford Bridge y San Mamés. Esos dos triunfos tienen un denominador común: la portería a cero. La pregunta es, ¿por qué defiende peor el Valencia jugando como local? El equipo defiende exactamente igual que con Marcelino García Toral. La teoría es la misma. Celades no ha querido tocar nada y ha mantenido todos y cada uno de los automatismos defensivos que hicieron campeón a este equipo. De ahí que en sus seis partidos haya defendido con un 4-4-2. El equipo se junta y se siente cómodo defendiendo fuera de casa porque no tiene la responsabilidad de llevar el peso del ataque. La desconexión llega en Mestalla. Ahí Celades sí que ha metido mano. El técnico quiere un equipo en fase ofensiva más valiente, que tenga más la pelota y sea capaz de genera más recursos de ataque. Que arriesgue más.

Y ahí es donde está la grieta de este equipo. El Valencia de Celades todavía no ha sido capaz de encontrar el equilibrio entre el plus ofensivo que quiere Celades en casa y la solvencia defensiva que necesita cualquier equipo que aspire a Champions. Algunos jugadores apuntaron en esa dirección tras el partido. Es el caso de Francis Coquelin. «Fuera de casa defendemos muy bien, en Mestalla intentamos jugar más y dejamos más espacios, vamos a trabajar para cambiar esto en los próximos partidos».

Los números ratifican esas sensaciones de los jugadores. El Valencia de Celades ha perdido consistencia defensiva. Ha encajado 12 goles en 6 partidos. Es decir, una media de dos goles por encuentro. El problema es que 7 de esos 12 goles han llegado en Mestalla. El Ajax marcó tres goles, el Getafe de José Bordalás otros tres y hasta el colista Leganés vio puerta en el viejo coliseum. El Alavés tiene que quedarse a cero. Mientras no sea así el equipo la temporada del Valencia está condenada a la irregularidad.