La remontada era complicada. Era difícil motivarse sin aficionados en el campo en un ambiente totalmente desconocido, pero la ilusión es lo útimo que se pierde. El Valencia cayó eliminado en base a estas situaciones:
Gol de la Atalanta en el inicio
Había que intentar dejar la portería a cero, pero en los primeros minutos fue la Atalanta el que se adelantó en el marcador. Fue en una internada del más peligroso de los italianos , Ilicic, en la que Diakhaby pecó de impetuoso y le derribó claramente. El penalti lo transformó el mismo Ilicic para poner muy cuesta arriba la eliminatoria.
Un Atalanta reconocible
El Atalanta se mostró como en el partido de ida, con un equipo potente en la fase ofensiva. Presionan en todo el campo, no dejan sacar el balón en la construcción, y se lanzan contra la portería contraria sin ningún rubor. Lo volvieron a hacer en Mestalla y volvieron a demostrar su facilidad defensiva. El Valencia le hizo 3 goles, pero está claro que a ellos no les importe porque siempre lo hacen.
Un Valencia endeble en defensa
En ataque, el Valencia aprovechó con suficiencia la debilidad defensiva del Atalanta. Y en sendos errores de la defensa italiana, Gameiro en dos ocasiones y Ferran, con una gran vaselina, consiguieron muy puntualmente alimentar el hilo de la esperanza. Pero esto no es posible cuando en tu fase defensiva muestras las debilidades, sobre todo en la parte central, impropias de un equipo que quiere llegar lejos en la competición de la Champions.
Medio tiempo para Guedes
Celades señaló claramente a Diakhaby y sacó a Guedes para intentar mejorar el juego ofensivo. Está claro que ofensivamente el Valencia mejoró, pero con dos centrocampistas, Kondogbia y Coquelin, de centrales, no era suficiente para parar el juego ofensivo de los italianos. Lo intentó el Valencia con la salida de Cheryshev y de Florenzi, pero el daño estaba en la defensa y el equipo terminó perdiendo el partido y la eliminatoria. Ilicic, en tres ocasiones más, batió a Cillessen, mostrando en una gran facilidad goleadora.
Eliminación justa
Podríamos pensar que, quizá, con el apoyo de los aficionadosm el Valenica podría haber remontado. Pero la proeza se convierte en algo inalcanzable cuando no has sabido cerrar tu portería ante un rival tan ofensivo, aunque tu nivel atacante haya sido correcto como anoche. La sangría defensiva condenó al Valencia
