El Ayuntamiento de València considera «inaceptable y carente del más mínimo fundamento» que el Valencia le culpe de los retrasos en el cumplimiento de la Actuación Territorial Estratégica para construir el Nuevo Mestalla en las alegaciones que presentó ante la Conselleria de Economía tras denegarle esta la reorganización y prórroga de la ATE.

En un escrito, el consistorio asegura que las alegaciones del club «no desvirtúan en nada el contenido del informe emitido el 17 de mayo» que confirmaba que el Valencia no había iniciado «ninguna de las cinco obras comprometidas en la Fase 2» y le atribuía la responsabilidad en ese retraso. El consistorio dice que no se sostiene «en ningún modo» la inacción de la que le acusaba el club «a la vista de los informes emitidos por los distintos servicios municipales con competencias en el desarrollo y ejecución de la ATE».

Respecto al proyecto de reparcelación que presentó el club en septiembre de 2016 señala que era «totalmente improcedente» desde un punto jurídico atendiendo las condiciones de la ATE y aunque admite que «lo procedente era acordar sin más el archivo de las actuaciones» explica que no se hizo «por razones de pura cortesía hacia el club».

«El informe municipal advierte de que el proyecto presentaba defectos que impedían su tramitación. Notificado el club el 5 de julio de 2019, éste indica que la documentación requerida está en elaboración. No obstante, el 11 de septiembre de 2020 se acuerda tener por desistida a la mercantil al no haber aportado la documentación requerida para continuar el trámite. El Valencia, además, no recurrió esta decisión, por lo que se trata de un acto firme y consentido», recalca el escrito.

Además, el Ayuntamiento dice que, aunque el Valencia «asegura que el 22 de marzo de 2018 presentó por registro la Memoria justificativa de evacuación del Nuevo Mestalla», eso «no consta» en ningún registro municipal.

Sobre la licencia, el informe establece que el Valencia tiene concedida licencia de obras desde el 28-7-2008 con diferentes modificaciones y que, por tanto, la obra está paralizada exclusivamente «por voluntad de los titulares desde aproximadamente marzo del 2009».

El concejal de Hacienda del Ayuntamiento de València, Borja Sanjuán, insistió en declaraciones facilitadas a los medios que las acusaciones del club al consistorio no tienen «el más mínimo fundamento» y añadió que algunos de los argumentos del club «son de todo punto falsos y, en otros, lo único que hacen es desvelar la falta de diligencia a la hora de cumplir sus compromisos».

Sanjuán puso como ejemplo que en diecisiete meses no entregaron «una documentación que se les había requerido o que el acto que ahora critican a la Administración ni siquiera fue recurrido en su momento». «Las excusas puestas por la propiedad del Valencia son del todo inválidas y que la única responsabilidad de que no se hayan retomado las obras del nuevo Mestalla está en la propiedad del Valencia y no en el Ayuntamiento», señaló.

«Son ellos los que ahora se han quedado sin excusas administrativas y parece, afortunadamente, que también sin excusas económicas. Por tanto, desde este Ayuntamiento lo que les pedimos es que dejen de embargar el campo y retomen las obras», afirmó.