Este domingo a partir de las nueve de la noche, Mathew Ryan se medirá al primer equipo que le dio una oportunidad en España, el Valencia CF. El guardameta australiano fue traspasado al conjunto de Mestalla procedente del Brujas en el verano de 2015, cuando apenas tenía veintitrés años. En ese momento se convirtió en el portero más caro de la historia del Valencia CF y en la segunda operación más costosa de un futbolista australiano. La exigencia para Mathew Ryan desde su llegada a la Capital del Turia fue máxima. Su debut oficial con la elástica blanquinegra fue en la fase previa de la Champions League ante el Mónaco. El nuevo portero brilló en una eliminatoria que no hizo más que afianzar aún más al portero australiano como el guardameta titular. Todo hacía indicar que la secretaría técnica de Mestalla había acertado en su apuesta para sustituir a Diego Alves, lesionado de la rodilla derecha.

Sin embargo, una lesión en el segundo partido de liga le obligó a parar tres meses. A partir de ahí nunca más volvió a afianzarse en el puesto con el baile de entrenadores y acabó saliendo en el mercado invernal de su segunda temporada ante la falta de minutos. Este verano volvió a LaLiga de la mano de la Real y en los dos partidos que ha jugado lo ha hecho con un grandísimo nivel.