Ilaix Moriba ya es jugador del Valencia CF. El club hizo oficial su llegada hasta final de temporada y sin opción de compra. El guineano de 19 años, propiedad del RB Leipzig alemán, firmó ayer su nuevo contrato de cesión hasta el próximo 30 de junio de 2022 convirtiéndose así en el segundo refuerzo del mercado de invierno después del central suizo Eray Cömert. Un último retraso en la firma de documentos evitó que el jugador entrenara ayer junto al resto del equipo. Mañana (hoy hay día libre) conocerá a sus nuevos compañeros y se pondrá por primera vez a las órdenes de José Bordalás. En su cabeza ya está el partido de cuartos de final de la Copa del Rey contra el Cádiz del miércoles 2 de febrero en Mestalla. Ilaix quiere empezar su andadura con buen pie. Lo necesita.

El nuevo jugador del Valencia pasando el reconocimiento médico. vcf

El futbolista no ha tenido el protagonismo que esperaba en la Bundesliga y siente que está ante una oportunidad de oro para relanzar carrera y recuperar su estatus de estrella emergente con la que salió del Barcelona. Sus primeras palabras como jugador del Valencia son toda una declaración de intenciones. «Vengo con la moral alta, he debutado en la Copa de África, con mi país y eso me encantó, vengo contento y motivado para seguir jugando aquí y demostrar lo que valgo», señaló al club.

La voluntad de Ilaix ha sido fundamental para alcanzar un acuerdo. El guineano reconoce que el Valencia es un equipo que le gusta y da las gracias al club por la confianza. «El Valencia es un equipo que me gusta, que siempre está arriba, intentando estar a la altura de los grandes equipos. Quise estar aquí y gracias a Dios por todo lo que han hecho el presidente y todos los que han hecho para que yo esté aquí», dijo. Su mensaje es ambicioso. Quiere devolver al Valencia «donde se merece». «Yo solo quiero darlo todo en el campo. Siempre que juego intento hacerlo lo mejor que puedo y dar lo mejor de mí al equipo y al entrenador. Vamos a intentar hacer feliz a la afición y poner al Valencia donde se merece».

Para que Ilaix se haga fuerte en el Valencia tendrá que ganarse antes la confianza de José Bordalás en un contexto táctico algo distinto al que está acostumbrado a jugar.

Aprender de Bordalás

Moriba no es exactamente el perfil de mediocentro que buscaba el entrenador, pero está obligado a sacarle rendimiento. El guineano espera «aprender todo lo que pueda» del técnico. «Siempre que juego intento dar todo de mí, me gusta competir, no me gusta perder en nada. Me identifico con esa filosofía y estoy contento de que me pueda ayudar en todo lo que pueda y voy a aprender todo lo que pueda de él». Este sábado conocerá a la plantilla y al cuerpo técnico y entrenará por primera vez en la ciudad deportiva de Paterna. De momento, lo que conoce le gusta: Mestalla y la ciudad que a su vez es la de su hermano, canterano del Juvenil A del Levante. «Mestalla es un campo difícil, la ciudad es maravillosa y tengo que rendir lo mejor que pueda y dar lo mejor de mí», aseguró. el nuevo futbolista de la entidad valencianista.

Ilaix lucirá el dorsal ‘23’ a la espalda que ha dejado libre Jason Remeseiro con su salida destino al Deportivo Alavés en los incios de este mercado de invierno. El club le dio a elegir entre los números que quedaban libres y el jugador lo tuvo muy claro. Quiere el ‘23’ que en su día llevaron leyendas del mundo del deporte como Michael Jordan, icono prinicpal de la NBA en los Chicago Bulls o LeBron James en Los Lakers. «Me dijeron los números que quedaban y cuando me dijeron que estaba libre el 23 no lo dudé porque es un número que me identifica mucho por todas las grandes leyendas que han lucido el 23», explicó el jugador de la entidad blanquinegra.

Eray Cömert, inscrito

El nuevo central fue inscrito ayer en LaLiga con el dorsal ‘24’, el que dejó libre Cristiano Piccini cuando se marchó al Estrella Roja de Belgrado, y ya es jugador del Valencia a todos los efectos. El suizo está a disposición de Bordalás para disputar el partido de Copa del miércoles contra el Cádiz. El ex del Basilea, a diferencia de Moriba, ya ha acumulado dos entrenamientos con el grupo (jueves y viernes). El nivel de urgencia en la posición de central es mayor que en el centro del campo porque el entrenador tiene lesionados a Gabriel Paulista y Omar Alderete. Ahora mismo solo están ‘sanos’ Mouctar Diakhaby y Cristhian Mosquera.

Las bajas limitan a Bordalás a nivel táctico hasta el punto de que la lesión del paraguayo Alderete en el Wanda Metropolitano obligó a Hugo Guillamón a retroceder de nuevo su demarcación a la línea defensiva y al equipo a jugar sin pivote posicional. En este contexto, el Valencia necesita incorporaciones que impidan que cualquier baja en la columna vertebral del equipo trastoque de manera radical los planes del técnico alicantino.