Las palabras de Inma Ibáñez sobre el compromiso de Peter Lim con el Nuevo Mestalla todavía resuenan en el ambiente valencianista. «El Valencia es el que tiene el compromiso de construir el estadio, no Peter Lim. El Valencia debe ser el que afronte sus problemas. Lim me ha dado préstamos y no me ha dejado tirada nunca pero nos confundimos si creemos que Lim tiene que pagar esto, es el Valencia el que tiene que garantizar la viabillidad», explicó la directora financiera del conjunto de Mestalla. A pesar de eso, la única realidad es lo que decían los documentos y «los criterios de valoración por los que se regía el proceso de selección de potenciales inversores para la compra de acciones del Valencia CF».

Concretamente, el punto 3 decía lo siguiente: tendrá «el compromiso de acabar el estadio con las premisas acordadas con el arquitecto Mark Fenwick y cerrar los compromisos con el Ayuntamiento incluyendo la permuta de terrenos...». En definitiva, en ese momento había una realidad y es que Meriton, tras estar de acuerdo con esos puntos, estaba de acuerdo en comprometerse a acabar el estadio. Peter Lim, máximo accionista de Meriton Holdings, sí que consideraba entonces como suyo el proyecto del Nuevo Mestalla y tenía un compromiso total con terminarlo.

No sería la primera vez eso sí que Meriton falta a sus intenciones después de ‘vender a los cuatro vientos’ con su llegada al Valencia CF que el objetivo era tener el estadio para el año del centenario. Sin embargo, tres años después y a pesar de las explicaciones hace tan solo unos días en el feudo situado en Cortes Valencianas, el estadio sigue parado y sin arrancar.

Requerimiento

Libertad presenta un requerimiento. Con las dudas ofrecidas hace menos de una semana con el Nuevo Mestalla, Libertad ha presentado en este lunes unos documentos al Valencia CF en los que requieren al consejo de administración del VCF a que inicien las actuaciones pertinentes para que Meriton Holdings cumpla con sus compromisos cuando adquirió el paquete accionarial respecto a la asistencia financiera para abacar con el estadio. En esos puntos sí estaba el compromiso de acabar el nuevo estadio por parte de Meriton. También «la compra del antiguo estadio por al menos 150 MM si en dos años no se encontaba comprador. Los 150 millones entran en el Valencia CF». Una de las cláusulas además está denominada como «obligaciones del comprador tras la fecha de cierre de la operación».

De esta manera, Libertad pide al Consejo del VCF que el objetivo es iniciar las acciones judiciales que «en derecho les asisten tendentes a obligar a Meriton Holdings Limited a cumplir con los compromisos adquiridos en la escritura de transmisión operada, y ello en relación a prestar las garantías financieras propias o de terceros que permitan la pronta finalización de las obras del Nuevo Mestalla».