Situación límite

El Valencia, hundido en resultados y a las puertas de Segunda división, trabaja en la llegada de un sustituto para Voro, en mitad de una histórica crisis con alcance societario y que moviliza a gran escala a la hinchada

Cavani despeja de cabeza
un centro al área 
del Valencia.  efe/david borrat

Cavani despeja de cabeza un centro al área del Valencia. efe/david borrat / Vicent Chilet. València

Vicent Chilet

Vicent Chilet

La situación del Valencia bajo Peter Lim ha llegado al límite, en su globalidad y afectando a todos los órdenes. A nivel deportivo, económico y societario. La realidad clasificatoria es extrema, con la amenaza de la Segunda división siendo ya muy visible, a un solo punto del impacto psicológico de verse en posiciones de descenso. La caída en picado del Valencia se ha acelerado tras el regreso del Mundial y se ha multiplicado con las lesiones, la ausencia de fichajes en el mercado de invierno y por ahora de un relevo a la interinidad de Voro González. Pero los síntomas se remontan a jornadas atrás, cuando con Gennaro Gattuso en el banquillo el equipo comenzó a atascarse desde el empate cosechado por el Elche en Mestalla (2-2) el pasado 15 de octubre. Desde entonces han transcurrido 11 jornadas en las que el Valencia ha sumado 7 puntos de los 33 posibles. De no corregir la tendencia, y a pesar de quedar todavía 18 jornadas por delante, el club de Mestalla lleva ritmo de repetir, 37 años después, su único descenso. Un desastre que agravaría las crisis de trasfondo que no han dejado de acompañar al club en todo el periplo de Meriton Holdings en València, a nivel económico y social.

La deriva entra en una fase decisiva, de no retorno, para la supervivencia de un club debilitado hasta el agotamiento. El Valencia cumple con el guion de clubes históricos a los que una crisis estructural de gestión llegó a alcanzar a una plantilla solvente. Fue el caso del mencionado Valencia de 1986, de la Fiorentina de Batistuta y Effenberg o del Atlético de Madrid de Baraja, Valerón, Hasselbaink o Molina. En el caso presente, se añade la particularidad de que el caos societario impacta en una plantilla muy devaluada en los últimos años, muy joven y sin el arraigo de otros equipos, debido al excesivo número de futbolistas cedidos sin opción de compra. Voro sigue al cargo del equipo, en la primera semana «limpia» desde que regresó al banquillo, aunque el club trabaja en el fichaje de un nuevo técnico. El mismo Voro, en la esclarecedora rueda de prensa en Montilivi tras la derrota contra el Girona, dejó entrever que su influencia para detener la caída del Valencia era limitada, abriendo la puerta a un relevo cuya llegada podría pronunciarse en función del resultado del próximo encuentro frente al Athletic Club, duelo a gran temperatura deportiva y social.

La lucha por la permanencia en Primera y el futuro societario de la entidad marcarán la agenda. El margen de actuación de la masa social para auxiliar a su club queda enfocado en Mestalla. En la grada y en sus aledaños. Para este sábado, Libertad VCF, el colectivo opositor mayoritario ante Lim, ha convocado a las 20:00 horas, una hora antes del inicio del partido ante el Athletic, una masiva concentración de protesta que se pretende alargar hasta el minuto 19 de la primera mitad contra los rojiblancos, en la que se entraría en Mestalla para animar al equipo. Una acción en la que se busca visibilizar a nivel internacional la crisis que atenaza al centenario club.