Rubén Baraja: "Mestalla juega y tiene mucha magia"

El entrenador del Valencia CF dio las gracias a la afición por el ambiente en el estadio y destacó la capacidad de reacción del equipo en la segunda mitad para sobreponerse al gol inicial de Cyle Larin

El técnico Rubén Baraja, ayer en Mestalla.

El técnico Rubén Baraja, ayer en Mestalla. / Francisco Calabuig

Iván Carsí

El día más especial desde que cogiera las riendas del equipo de su vida. Baraja llegó eufórico, pero muy concienciado de que esto es solo una victoria más en toda la lucha que queda para certificar la salvación del Valencia. 

«Lo que es el fútbol. Cuando tienes un partido tan complicado como hoy, cuando vas perdiendo en casa la gente también está nerviosa... ese gol es cambiar la dinámica. El equipo ha demostrado ser capaz de remontar un partido complicado. No nos hemos vuelto locos buscando el segundo, hemos querido tener energía hasta el final. Un resultado así siempre ayuda, pero esto sigue», arrancaba visiblemente contento y todavía emocionado el entrenador vallisoletano.

«Es una fecha fetiche para mí por lo que significó. Cuando hemos llegado al descanso hemos dicho hemos sacado lo peor y ahora vamos a sacar nuestra mejor versión. Hemos creído hasta el final y nuestra gente se ha volcado con el equipo. Ha sido clave para darle la vuelta a la situación. He sentido mucha emoción. Cuando tú lo sientes como yo lo siento...», proseguía Baraja y haciendo especial hincapié en el cambio de mentalidad del equipo tras el descanso.

«Quizá hoy es el momento más potente que he vivido desde que estoy aquí. En ciertas cosas me ha recordado a ese partido y cómo la gente estaba hoy. Nuestra afición ha vuelto a demostrar que Mestalla juega. La magia de Mestalla», insistía en la importancia de factor ambiental para ayudar al equipo.

«Siempre trato de mandar un mensaje positivo en cuanto a la exigencia. Pero necesitas cosas que pasen y que te hagan más fuerte. El equipo había reaccionado en partidos, pero es que todo esto se traduce en los más importante cuando ganas como hoy. Paciencia e intensidad en los últimos minutos... al final esto es emocional, pero esto ayuda a que podamos crecer y encontrar nuestra mejor versión. A veces las cosas se ponen en contra, pero se pueden dar la vuelta desde el trabajo y el fútbol cambia si tienes esa mentalidad. Eso les trato de transmitir», explicaba sobre cómo han intentado convencer al equipo tras una mala primera mitad en Mestalla.

«Aquí lo que quiere uno es ganar partidos. Estoy trabajando con esa idea, los procesos te ayudan en el tiempo, porque creo que no es fácil cambiar dinámicas sobre la marcha. Hemos conseguido salir de esta situación un poco. El domingo tenemos ya otro rival directo. Tenemos que hacer las cosas bien y competir en cada partido y cuidar los detalles. Hoy se ha demostrado que el mensaje que mandamos es de empujar, de querer, de creer hasta el final», advirtió un Baraja que ya mira a la próxima final contra el Cádiz en el Nuevo Mirandilla el próximo domingo.

¿Será este el punto de inflexión? El técnico responde: «Era un partido muy importante. Era un año casi sin ganar dos partidos seguidos. Lo único que hemos hecho es seguir en la pelea. El mensaje del descanso es el de cambiar cosas, ir hacia adelante. Primero empatarlo, no precipitarnos y llegar al final con energía. Eso y el empuje de nuestra afición. Es fundamental como ya dije el minuto 1 que llegue aquí». 

Por último, el técnico no quiso olvidarse del héroe de la noche, un Javi Guerra que levantó a Mestalla con su golazo: «Es estar preparado para el momento que te toca y hacer las cosas bien. Ha creído hasta el final. Hoy le recomendaría que apagara el teléfono y que se fuera a su casa y le diera un abrazo a sus padres. Esto tiene que darle mucha confianza y darse cuenta de lo importante que es esta camiseta».

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