Un gol de falta y poco más sirve ante el Parla Escuela para pasar de ronda (0-1)

El Valencia llegó, marcó un gol y se volvió a Valencia con la clasificación. De juego se pudo ver poquito ante un rival de la sexta categoría del fútbol español (primera división autonómica aficionado grupo II) y que durante algunos tramos mostró más fútbol que los de Baraja. No solo tuvo que ver con las ganas y la intensidad, algo que como es habitual se ve más en los equipos de menor categoría, sino con el fútbol. El partido en general fue para olvidar pero un error gravísimo del meta del Parla Escuela colocando la barrera permitió a Pepelu marcar de falta sin demasiado esfuerzo. Ese tanto fue la única diferencia entre ambos equipos, pero sirve al Valencia para meterse en la siguiente ronda y pensar en positivo de cara al futuro. La segunda victoria consecutiva, tras una buena actuación ante el Betis, permite al Pipo mirar al Mallorca con otro aire.

El debut del Valencia en esta Copa del Rey arrancó con un ambiente frío y no solo por el clima. Los jugadores no salieron entonados ni mucho menos. Entre el césped, las dudas por ver cómo afrontaba el rival el arranque y algunos cambios en el once, al equipo le costó mucho tener algo de mordiente en campo rival. En cualquier caso, las caras menos habituales sí dejaban buenas sensaciones. Era el caso de Isma Santana y de Íker Córdoba, con un buen nivel de concentración y mucho mejor que algunos futbolistas que se presupone que están más acostumbrados a la dinámica del primer equipo. Germán Valera y Fran Pérez también conectaron con un partido en el que las ganas y la intensidad las ponía el Parla Escuela. Eso sí, el primer gol del encuentro lo hizo el Valencia. Pepelu aprovechó una falta en la frontal y el espacio que le dejó una barrera puesta como en prebenjamines para hacer el primer tanto valencianista en la competición.

Poco peligro

El gol no sirvió demasiado al Valencia para hacerse dueño del partido. Un par de tiros lejanos de Germán Valera y Fran Pérez fueron de lo poco potable de un primer tiempo que dejó más momentos desesperantes que jugadas para el recuerdo. La postura en general estaba clara. Tocaba pasar el trámite pero sin alardes. Y en esa línea el Parla Escuela fue creyendo poco a poco en sus posibilidades en un partido que el Valencia CF debió cerrar mucho antes.

A la salida del túnel de vestuarios, el Parla Escuela demostró tener más intención y ya en las primeras jugadas provocaron que la defensa valencianista tuviera que emplearse a fondo para frenar las acometidas del cuadro madrileño, que en el segundo tiempo fue mejor que el Valencia. Al menos en la primera media hora del mismo. Para buscar la reacción, eso sí, Baraja dio entrada a Warren Madrigal y Almeida, quienes tampoco pudieron mejorar en exceso lo que estaba pasando en el campo. El 'tico', eso sí, no entraba tanto en fuera de juego como un Dani Gómez bastante perdido ante el Parla Escuela. Tejón y Tárrega también entraron para tratar de buscar el segundo en un tramo final que dejó momentos de enfado de Baraja y que evidenció una falta de intensidad global extraña visto lo visto hace unos días ante el Betis, cuando el equipo estuvo a un nivel altísimo.

Warren mejoró al equipo

En los últimos diez minutos, Mario, del Parla Escuela, aprovechó un error en salida para probar a Dimitrievski, que estuvo bastante tranquilo y que incluso perdió tiempo en algún saque de portería ante una grada local bastante enfadada con esa actitud. Por su parte, Warren sí que dejó muestras de su potencial en unos minutos en los que más allá de pelearse con todos los defensas rivales, dejó claro que tiene más ganas que muchos habituales. Peleó, luchó y ganó varios balones que supusieron ocasiones como la de Almeida en el minuto 82. Incluso tuvo opción de hacer el 0-2 con un cabezazo fantástico que permitió a Nando, portero local, lucirse. Y prácticamente ahí murió un partido sin mucha historia pero al menos sin ninguna noticia negativa. Y eso es con lo que se deben quedar el Pipo y compañía.