Punto valioso en Montilivi para mantenerse fuera del descenso (1-1)

El Valencia CF endureció su piel en Montilivi para seguir con su mejora competitiva y, en especial, sumar un punto que le va a permitir encadenar una segunda semana fuera de los puestos de descenso. Los goles, obra de Diego López y Stuani, se concentraron en apenas seis minutos de la segunda parte. Un lapso de tiempo que separó las dos caras del equipo de Carlos Corberán. La mejor y más seria hasta el gol del asturiano, y la más sufrida, tras el tanto de cabeza con el que igualó el delantero charrúa. Ahora, los valencianos son decimosextos con 28 puntos, uno más que el Alavés y el Leganés, que abre la zona roja a falta de su duelo de este domingo en Butarque frente al Betis.

Las palabras en la previa de Corberán podían aventurar la fórmula por la que optó el entrenador a la caza de la primera victoria a domicilio de la temporada. El Valencia ha sido especialmente vulnerable en defensa cuando ha jugado lejos de Mestalla, así que el primer paso lo dio en la pizarra: defensa de cinco con tres centrales claramente definidos. Con Mouctar Diakhaby, nuevamente titular, acompañado por César Tárrega y Cristhian Mosquera. Y el remedio funcionó, sobre todo, a lo largo de un primer asalto en el que el Girona se perdió con un dominio estéril que apenas encontró espacios ni ocasiones.

De hecho, el primer aviso lo dio el Valencia mediante las botas de Javi Guerra. Cada vez que el de Gilet recogía la pelota disponía de metros por delante para lanzar a sus compañeros al contragolpe. Mientras tanto, en el banquillo local, Míchel se volvía loco gritando a su equipo, al que había alertado de que las amenazas más serias pasarían a la velocidad de la zancada del joven centrocampista valenciano.

Pasado el cuarto de hora, Yangel Herrera empujó y pisó a André Almeida cerca de la frontal del área, pero el colegiado, Munuera Montero, solo le enseñó cartulina amarilla al medio venezolano que años atrás estuvo en la cartera del Valencia. El lanzamiento, obra del mismo portugués, se estrelló con la barrera. Minutos más tarde, un chut con la derecha de Umar Sadiq, dentro del área, sí obligó a actuar al portero de los gerundenses. Paulo Gazzaniga voló estirando el brazo para subsanar el error del checo Krejci, que había dejado a merced del delantero un servicio envenenado de Enzo Barrenechea. Poco después, el propio Krejci respondería con la mejor aproximación de los catalanes en el primer acto. El cabezazo del central lo abortó hacia el córner Diakhaby.

Transcurrida la media hora, el partido comenzó a accidentarse. Iván Martín se retiró lesionado y el médico blanquinegro tuvo que vender el dedo maltrecho de José Gayà, que aun así continuó aguantando el dolor en la segunda parte. No obstante, antes del descanso, Guerra cerró una cabalgada con un zurdazo cruzado que, pese a salir fuera por centímetros, heló el estadio de Montilivi.

La portería a cero, tras 16 desplazamientos sufriendo una sangría de goles en contra, era la clave. Giorgi Mamrdashvili regaló una intervención colosal antes del 0-1. Su mano izquierda desvió un remate de cabeza de Arnau a la esquina baja del arco. Poco después, en una acción veloz Foulquier y Diego López le dieron todavía más valor a la acción de Giorgi. El galo profundizó por la derecha y vio perfectamente la llegada al otro palo del ‘Guajín’, que mandó el balón a la red con el exterior (0-1, m. 57).

El horizonte lucía mejor que otras veces. Con el botín en la mano, sin embargo, el Valencia no supo guardarlo. El trío de centrales no detectó el peligro de Cristhian Stuani en el área. El uruguayo envió a gol un servicio enroscado por Miguel Gutiérrez (1-1, m. 63). A partir del empate, los de Corberán vivieron sus peores momentos de la noche. Una mano de Giorgi a chut de Danjuma evitó el desastre.

Mientras el reloj corría, los blanquinegros perdieron metros y dos disparos de Javi Guerra fueron el único recurso que quedó. En los minutos finales, los de Corberán se recompusieron para mantener el empate.