Comida de equipo con múltiple sabor a despedida

El próximo viernes, el Valencia CF pondrá en el Benito Villamarín el punto y final a una temporada dura y con una enorme carga emocional que ha cabalgado sobre el alambre del descenso a Segunda División. Para salvarse fue clave el trabajo de Carlos Corberán, que motivó un cambio jamás visto en la historia de LaLiga que se saldó con una permanencia holgada. El valor del grupo fue fundamental para levantar la peor primera vuelta jamás realizada por los valencianistas y ayer celebraron su última comida con sabor a despedida. En la comida estaba presente la plantilla y el cuerpo técnico, pero no acudió Corberán.

Dos de los casos más claros de despedidas son Giorgi Mamardashvili y Enzo Barrenechea, los dos futbolistas más aclamados por el coliseo de la avenida de Suecia cuando finalizó el choque contra el Athletic Club. Ambos protagonizaron un gesto de reconocimiento mutuo intercambiando sus camisetas a la salida de la comida, deshaciéndose en elogios el uno con el otro. La lista apunta a ser muy larga. En la portería Jaume Doménech también puso punto y final a su estancia en el club, siendo despedido con honores por sus compañeros y con una ovación de Mestalla. Siguiendo por la defensa, si no hay acuerdo con Dimitri Foulquier -que se quiere quedar y Carlos Corberán quiere que se quede- para la renovación, abandonará también el club. Cristhian Mosquera, por su parte, es uno de los futbolistas más cotizados de la plantilla y colecciona intereses de equipos importantes, por lo que podría salir traspasado. Max Aarons, que apenas ha jugado, finaliza su préstamo y vuelve a Inglaterra.

En la medular, por otra parte, a Enzo se sumará presumiblemente un Hugo Guillamón que no entra en los planes del entrenador y al que le queda un año de contrato. También Iván Jaime, que finaliza su cesión y vuelve al Oporto. En esta parcela siguen, en principio, Pepelu, Javi Guerra y André Almeida, aunque será el mercado y las ofertas las que marquen su destino.

En ataque finalizan las cesiones de Rafa Mir y Umar Sadiq, por los que no parece que el Valencia vaya a hacer ningún esfuerzo económico. El nigeriano fue un hombre clave para salvar la categoría. Luego está por ver si llegan ofertas por alguno de los jugadores de banda. De momento habrá siete bajas seguras, pero se espera que sean más entre futbolistas que no cuentan y los que puedan recibir una oferta que el club considere aceptable. Por lo que pueda pasar, ayer se citaron en una comida que supo a despedida para muchos.