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Trescientas personas se reunieron el lunes por la noche en el salón de plenos del Ayuntamiento de Bonrepòs i Mirambell para informarse sobre el proyecto de construcción de una depuradora a 100 metros de distancia de su núcleo urbano y sobre 62 hanegadas de huerta que el Plan de Acción Territorial pretende conservar. Ellos rechazan la infraestructura.
El consistorio estaba abarrotada de vecinos, miembros de diferentes asociaciones y del colectivo de agricultores que querían conocer las consecuencias de tener esta planta de depuración tan cerca.
Por ello se unieron a la plataforma creada para que esta Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) no se ubique en el emplazamiento elegido, frente a sus casas y en plena huerta. Aunque está ubicada en término de Valencia, los vecinos de Bonrepòs se sienten "agraviados" por su cercanía, según fuentes de la asociación.
"Estamos en contra de que esté aquí, en zona de huerta protegida y cultivada frente a nuestras casas y nuestra escuela", según explicó ayer un miembro de la coordinadora. "Es evidente que si no nos movilizamos no vamos a conseguir nada", recalcaron las mismas fuentes, quienes aseguraron que hay otras alternativas "que pasan por no destruir la huerta que cultivan nuestros agricultores, sino que pueden hacer las depuradoras soterradas o ampliar las ya existentes".
Los vecinos de Bonrepòs no luchan solos, ya que actúan conjuntamente con la plataforma creada recientemente en Carpesa, pedanía de Valencia en cuyo término estará ubicada la EDAR y cuyos vecinos también están en contra de este emplazamiento. Además, los partidos políticos de Bonrepòs i Mirambell también se adhieren a este plataforma cívica. La estación se ubicará en 51.555 metros cuadrados de protección agrícola.
