La plataforma vecinal Salvem el Cabanyal ha valorado hoy el ambiente de "tranquilidad y serenidad" que impera en este barrio valenciano después de la tensa jornada de disturbios de ayer, donde las protestas para impedir más derribos por parte del Ayuntamiento se saldaron con dos heridos y dos detenidos.

El portavoz de Salvem el Cabanyal, Faustino Villora, ha señalado a EFE que esos dos detenidos, un padre y su hijo que se encaramaron a la pala excavadora que iba a iniciar la demolición del inmueble situado en el número 31 de la calle de Francisco Eximenis, quedaron finalmente en libertad sobre las diez y media de anoche.

Asimismo, ha señalado que "unas 300 personas" han acudido esta mañana a una concentración en la calle de San Pedro, convocados por la plataforma y donde se ha dado cuenta de los temas debatidos en la asamblea extraordinaria celebrada anoche, que analizó los graves disturbios registrados esta semana en el barrio, especialmente el martes y ayer.

En el comunicado leído esta mañana, Salvem denuncia haber sido "víctima de la dictadura del PP de Valencia, que intenta justificar los derribos en este barrio" pese a estar pendientes las resoluciones judiciales que podrían impedirlos.

La plataforma asegura sentirse "desconcertada e indignada" con la Concejalía de Seguridad Ciudadana y con la Delegación del Gobierno en la Comunitat Valenciana, la primera por "destruir aceleradamente" el patrimonio arquitectónico del barrio y la segunda por ordenar al Cuerpo Nacional de Policía "agredir" a los vecinos "con brutalidad inusitada".

En este sentido, Salvem asegura que el departamento que dirige Ricardo Peralta "solo ha defendido las actitudes dictatoriales del PP al mandar los antidisturbios a proteger la innecesaria decisión de los dictadores en lugar de proteger a los ciudadanos".

Según ha señalado Villora a EFE, "hoy no ha venido ni un solo operario, ni siquiera a terminar de retirar los escombros" de la media docena de casas que los técnicos municipales han derribado ya desde que comenzaron los trabajos el pasado martes por la mañana, todos ellos comprendidos entre las calles de San Pedro, Luis Despuig y Francisco Eiximenis.

"La gente está hoy tranquila", ha remarcado el portavoz vecinal, quien ha reconocido sentirse físicamente "mejor" que ayer, cuando quedó tendido en el suelo, inconsciente, durante unos minutos tras la carga policial que dejó varios heridos, la mayoría por contusiones y heridas superficiales.

Asimismo, ha dicho que "numerosos" vecinos han interpuesto ya o pretenden presentar denuncias contra la Policía Local y el Cuerpo Nacional de Policía por esa carga.