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El conseller de Infraestructuras y Transportes, Mario Flores, acudió a las once de la noche del pasado martes al lugar donde realizaba su huelga de hambre un taxista de Valencia para prometerle que la limitación de la jornada laboral se tramitaría de forma urgente y pedirle que abandonara la protesta, cosa que efectivamente consiguió.

Así lo ha relatado a Levante-EMV el propio huelguista, Bruno Ruiz Lozano, quien se mostró sorprendido por la rápida reacción del conseller -sólo llevaba día y medio sin comer- y la forma en la que lo hizo, pues "acudió de noche acompañado únicamente de su chófer y su escolta", dijo.

En el lugar de la protesta (la puerta de la misma Conselleria de Infraestructuras y Transportes) había en ese momento una quincena de taxistas que estaban dando soporte al huelguista. Y fueron ellos los que levantaron acta de la promesa del conseller en un documento con sus carnés de identidad.

El concreto, Mario Flores prometió a los taxistas que se aplicará de manera urgente la limitación de la jornada laboral de los taxistas a 12 horas en caso de los autónomos y a 16 en caso de los autónomos con chóferes contratados. Esa fue la opción más votada por los taxistas del Área Metropolitana de Valencia en la consulta que se realizó el mes pasado, sin embargo en el Consejo de Operadores del Taxi se presentaron otras propuestas menos votadas, como trabajar este verano sólo en días alternos, y se generalizó la impresión de que se estaba demorando intencionadamente la opción más votada. Por ese motivo, Ruiz inició la huelga de hambre y de ahí el mensaje de tranquilidad del conseller Mario Flores. "Ahora sólo esperamos que lo cumpla", dijo el taxista.