El plazo para pagar el préstamo concedido por el Instituto de Crédito Oficial (ICO) al Consorcio Valencia 2007 vence hoy sin que el Ayuntamiento de Valencia haya aportado los 8 millones de euros que debe a la entidad. El equipo de Gobierno municipal mantiene su tesis de que el dinero que debían aportar al consorcio las distintas administraciones (16 millones del Estado, 16 de la Generalitat Valenciana y 8 del Ayuntamiento) era para capitalizar la entidad y no para devolver el crédito concedido del ICO, que supera los 300 millones de euros.

Ese crédito debía devolverse, en su opinión, con los beneficios que genere la explotación de la dársena, que aún no ha sido traspasada al Ayuntamiento.

Esta posición municipal contrasta, sin embargo, con la de la Administración central, cuyos responsables piden al Ayuntamiento "que aporte los 8 millones que debe al consorcio y se deje de llamadas telefónicas para intentar negociar el pago del crédito".

Fuentes gubernamentales recuerdan que el Estado es la única administración que ha puesto sus 16 millones y pide al resto que hagan lo mismo. "Y luego ya se hablará con el ICO de la forma de pagar el crédito", señalan las fuentes, que advierten que ahora el Instituto de Crédito Oficial puede reclamar este primer pago al Estado, que es el avalista de la operación, si el Ayuntamiento y la Generalitat no aportan su parte al consorcio y éste no salda la deuda.

El Gobierno pide que no se vincule el pago del crédito a la explotación de la dársena, ya que el aprovechamiento de este espacio está vinculado al Plan de Usos del Puerto de Valencia, que es "un documento complejo" que está en fase de elaboración.