El hospital de la Nueva Fe de Valencia no esta sólo abastecido por las cinco líneas de la EMT (más una nocturna) en transporte público. Como recuerdan desde la Asociación Valenciana de Amigos del Ferrocarril,"a unos 300 metros de distancia y en superficie está la estación Valencia-Font de Sant Lluís de la línea de cercanías Valencia-Castelló". En esta parada, que ahora usan 460 personas al día (la mitad son trabajadores de Renfe y Adif), circulan trenes de Cercanías cada media hora los días laborables, oferta que se reduce a la mitad los sábados y festivos. Se trata de "servicios donde se aúnan la rapidez: cinco minutos entre la céntrica Estación del Norte (donde hay combinación con dos líneas de metro) e igual tiempo desde la estación del Cabanyal; y la economía, ya que cualquier viajero procedente de otra línea de cercanías no precisaría pago adicional al aplicar Renfe tarifas por zonas concéntricas", explica Esteban Gonzalo Rogel, vicepresidente de Asuntos Externos de la Asociación Valenciana de Amigos del Ferrocarril.

De esta manera, cualquier usuario de Cercanías procedente de Xàtiva o Gandia simplemente tendría que realizar un transbordo en la estación del Norte y, por el mismo dinero, coger un tren a Castelló y bajarse en la primera parada tras salir de la terminal de Xàtiva. Desde Castelló y Sagunt (líneas C-2 y C-5) podrían acceder simplemente bajándose en la penúltima parada antes de la Estación del Norte. Desde los amigos del ferrocarril recuerdan que "la distancia entre la Nueva Fe" y la estación de Font de Sant Lluís es "inferior a la que existe entre la mitad de los hospitales públicos de Valencia y los andenes de su estación de metro más cercana". Incluso si se retranqueara la estación y se construyera un apeadero apenas unos 50-100 metros antes de la actual estación, la Nueva Fe podría tener un acceso directo a Cercanías, como tiene, por ejemplo el Hospital Ramón y Cajal de Madrid.

¿Qué hacen las administraciones?

El representante de la Asociación de Amigos del Ferrocarril se pregunta si Renfe habrá pensado "en mejorar la oferta de sus servicios sin esperar a que lo pidan los clientes, si la Consellería de Infraestructuras y Transporte ha requerido la mejora o si el Ayuntamiento de Valencia tiene previsto construir un vial que evite el actual contorneo de casi un kilómetro entre la estación Font de Sant Lluís y el nuevo hospital, ya que la oferta de transporte anunciada cuando se entregaron las obras de la Nueva Fe (cinco líneas de la EMT) es una invitación para la utilización del vehículo privado a los 6.000 trabajadores y 4.000 pacientes diarios que se espera en el centro hospitalario". Habría que sumar las visitas de familiares que aumentarán el tráfico alrededor del nuevo centro sanitario.

Como ha informado Levante-EMV, de las tres posibles conexiones ferroviarias desde Metrovalencia hasta La Fe ninguna llega a tiempo para la apertura del nuevo hospital previsto para octubre (las consultas externas) y diciembre (el resto del hospital). La prolongación de la Línea 1 (anunciada en 2006 para evitar la curva de la Estación de Jesús donde murieron 43 personas) depende de la Estación Central y el tranvía orbital no tiene fecha de ejecución. La opción más rápida era construir un ramal de la T2 a Natzaret desde Hermanos Maristas hasta la nueva Fe, pero ni siquiera se ha licitado el proyecto.