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La Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda, está ensayando en Requena el uso de repelentes para evitar los daños que la plaga de conejos que se extiende por amplias zonas de la Comunitat Valenciana provoca en cultivos como el de la vida y los frutales.
La experiencia tiene su origen en la iniciativa la zona vitivinícola de Requena, donde el conejo provoca importantes destrozos en al menos un centenar de parcelas, pero el próximo años podría ser trasladada al resto de comarcas afectadas.
Técnicos de la conselleria trabajan ya en la elaboración de un plan sistemático para la aplicación y posterior seguimiento de los efectos repelentes de distintas sustancias aplicadas hasta ahora con carácter experimental, según confirmaron fuentes oficiales de la conselleria.
El conseller de Medio Ambiente, Agua y Urbanismo, y vicepresidente tercero del Gobierno valenciano, Juan Cotino, se entrevistó el pasado viernes en Requena con algunos de los agentes medioambientales que han participado en esta iniciativa.
Según ha explicado el conseller, el repelente proporciona a los cultivos un sabor distinto que tiene un efecto disuasor sobre los conejos. El producto se aplica mientras está germinando las plantas y su efecto desaparece a los nueve o diez días. "Durante este tiempo, los animales rechazan el cultivo y por lo tanto se evita el daño que ellos pueden provocar".
"Se trata de un producto complementario a otras acciones desarrolladas por la Conselleria para evitar el daño en la agricultura y que además no tiene un efecto nocivo para la salud de las personas", ha manifestado Juan Cotino.
El repelente aplicado con éxito en el viñedo requenense está elaborado a base de extractos vegetales naturales tratado para retrasar su oxidación y su degradación por la luz solar. Se aplica fumigando sobre los brotes tiernos del viñedo -un bocado "exquisito" para los conejos, explicaron fuentes de conselleria- y provoca una desagradable experiencia gustativa en el conejo- una mezcla de aspereza y sabor amargo muy intenso-, que "aprende" la lección y "descarta" para el futuro alimentarse de estos brotes.
"La lástima es que no se lo pueden contar entre ellos -los conejos- y hay que aplicarlo para cada generación sepa que no le interesa comer de la vid".
El descubrimiento de este repelente-usado previamente como abono - fue algo "casual" según las fuentes. Previamente se han utilizado otras sustancias, también repelentes, elaboradas a base de guindilla, aunque resultan "más caras y menos eficaces".
No hay soluciones
mágicas para la plaga
La consellerias de Medio Ambiente y Agricultura están preocupadas por las dimensiones que ha alcanzado la plaga de conejos silvestres en la Comunitat Valenciana. Lo que comenzó como una anécdota en la Vall d' Albaida, es hoy un auténtico quebradero de cabeza en esta comarca, en Requena-Utiel , la Hoya de Buñol y en zonas de Alicante.Los agricultores reclaman medidas urgentes a la Generalitat y que les compense por los daños. Fuentes de la conselleria dicen que no hay "soluciones mágicas" contra la plaga y que el repelente es "una medida más". "Hay que programar cacerías controladas, quemar vegetación en zonas de madriguera, hacer obligatoria la quema de sarmientos, etc. Si no actuamos coordinadamente la plaga se extenderá", dijeron. j. S. valencia.
