Una fotografía con la "Senyera" como recuerdo del 9 d'Octubre y gracias a la iniciativa de Rita Barberá, alcaldesa de la ciudad. Ese es el mensaje que ha calado entre la mayoría de partidos políticos que ven en el anuncio, de exponer la bandera de la procesión cívica, en un paso más para apropiarse de los símbolos valencianos, con el único objetivo de conseguir mayores éxitos electorales.

Una estrategia para dividir y marcar el territorio de la "valencianía" frente a sus oponentes políticos, que ya le dio sus frutos a finales de la pasada década, cuando literalmente se zampó al electorado de Unión Valenciana. Precisamente José Manuel Miralles, presidente de UV, no cree en las casualidades al reconocer "hace algunos días el discurso anticatalanista" del conseller Rafael Blasco y del propio jefe del Consell, Francisco Camps. Discurso que tiempo atrás tenía el pedigrí del partido que fundó Vicente González Lizondo.

Efectivamente, la exposición de la "Senyera" la víspera del 9 d'Octubre, en el Salón de Cristales del Ayuntamiento de Valencia, para que la gente la contemple e inmortalice el momento, es una novedad que se podría haber puesto en marcha hace muchos años pero que sin embargo coincide con el 9 d'Octubre previo a los comicios de 2011. "La 'Senyera' se defiende todos los días y no antes de las elecciones" afirmó el presidente de Coalición Valenciana, Juan García Sentandreu quien cargó contra Barberá por su defensa del uso del catalán.

En el extremo opuesto Joan Ribó (Compromís) denunció el uso partidista de la bandera y recordó que "valencianos somos todos y no sólo Rita y Camps".

Amadeu Sanchis (EU) ironizó al afirmar que "Rita también se enrolla con la 'Senyera' como dijo Camps" cuando se defendió de la presión judicial que sufre. Sanchis apeló a la exposición y explicación de otros símbolos históricos como el "Penó de la Conquesta" en el que aparece la "Senyera", sin la franja azul.