El Síndic de Greuges ha recomendado al Ayuntamiento de Valencia y a la Generalitat que trabajen para proteger el patrimonio cultural valenciano. Así, ha instado al consistorio y a la Conselleria de Cultura y Deporte para que "de forma coordinada y dentro de su respectivo ámbito competencial, sigan adoptando todas las medidas preventivas, sancionadoras y de rehabilitación que se estimen procedentes" con el fin de preservar dicho patrimonio. Esta recomendación se recoge en la respuesta que el Defensor del Pueblo valenciano hace a la queja que una asociación denominada Cercle Obert le remitió sobre la rehabilitación de los inmuebles de interés histórico-artístico existentes en el barrio de Benicalap, en la ciudad de Valencia. Entre estos edificios se encuentran La Ceramo, la antigua fábrica de Bombas Gens, la Alquería del Moro, la Alquería de la Torre y el Casino del Americà.

El Síndic de Greuges valora, no obstante, la disposición mostrada por la administración local y la autonómica para trabajar en este sentido y espera que ésta "se pueda materializar en el futuro para seguir trabajando conjuntamente". Así, explica que admitida a trámite esta queja, ambas administraciones le entregaron copia de las contestaciones enviadas en su día al autor de la reclamación con la información sobre lasactuaciones que se estaban realizando y con el ofrecimiento de mantener reuniones para "seguir avanzando en la protección del patrimonio cultural valenciano".

La entidad que formuló la queja trasladó su reclamación al Síndic de Greuges después de haber solicitado al Ayuntamiento de Valencia y a la Conselleria de Cultura, en febrero de 2010, "la adopción de medidas de recuperación y rehabilitación de los inmuebles de interés cultural existentes en Benicalap" y después de no haber recibido "ninguna contestación hasta el momento". La asociación destaca "la necesidad de adoptar medidas para evitar el estado de abandono y degradación de los inmuebles", así como la conveniencia de que sean "rehabilitados y destinados a equipamientos socio-culturales".

Una responsabilidad pública y privada

El Síndic de Greuges señala que el patrimonio cultural "es una de las principales señas de identidad del pueblo valenciano y el testimonio de su contribución a la cultura universal". En este sentido afirma, como recoge su recomendación, que "los bienes que lo integran constituyen un legado patrimonial de inapreciable valor". Así, apunta que su "conservación y enriquecimiento corresponde a todos los valencianos y, especialmente, a las instituciones y los poderes públicos que lo representan, en este caso, a la Conselleria de Cultura y Deporte de la Generalitat y al Ayuntamiento de Valencia", precisa, aunque añade que no se puede "obviar que en materia de protección del patrimonio cultural la colaboración de las personas privadas que son propietarias de los inmuebles". e. p. valencia