El barón de Llaurí y Alcalalí, Joaquín Manglano y Baldoví, falleció el 27 de octubre a los 88 años. El entierro se efectuó en la intimidad familiar aunque el funeral se celebrará mañana a las 20 horas en la iglesia del Patriarca.

Grande de España y primogénito del barón de Cárcer, quien fue alcalde de Valencia en plena postguerra -entre 1939 y 1943-, era también coronel de ingenieros, geodesta militar, diplomado en organización industrial y agente de la propiedad inmobiliaria.

Manglano, casado con María de Puig y de Fontcuberta, fue militar y reunía en su persona varios títulos y condecoraciones como la de caballero del Real Estamento Militar del Principado de Girona.

Una entrevista con él publicada en Levante-EMV en 1998 sirvió de arranque a la serie "Nobleza obliga". En ella contestaba a la periodista María José Muñoz Peirats respecto a su condición de aristócrata: "Sobre todo soy un ser normal. Trato con mucha gente, tengo amigos de distintas profesiones y clases sociales y todos me tratan como a un ser normal". Para él, "el apellido obliga a actuar noblemente y como un caballero, además de ser consecuente con mis principios" a la vez que aseguraba estar "muy contento donde he nacido y de la situación que tengo". La religión era para él "lo más importante de todo" y la justicia, "lo principal en un Estado de derecho porque es la garantía de la libertad de los ciudadanos".