Vicente Guallart (Valencia, 1963) fue el padre de Sociópolis, el proyecto urbanístico de la Generalitat más importante de los últimos años, que presentó en la Bienal de Valencia en el año 2003. Antes había trabajado a caballo entre la Comunitat Valenciana y Cataluña, donde finalmente ha hecho carrera y ciudad en la que instaló su despacho en 1992. Este mismo año ha sido nombrado por el nuevo alcalde de Barcelona, Xavier Trias, arquitecto jefe de la ciudad. Antes, ya había sido nombrado Director del Institut d'Arquitectura Avançada de Catalunya.

Guallart ha defendido unos planteamientos ecologistas y de autosuficiencia en los que conviven naturaleza y tecnologías. Un ejemplo de estos postulados son sus «huertos urbanos» de Sociópolis, todavía inéditos por los retrasos en las obras, o la mansión en Alzira que tienen el exconseller de Solidaridad, Rafael Blasco, y la directora del Institut Valencià d´Art Modern (IVAM), Consuelo Císcar. Esta vivienda está plenamente integrada en los centenares de naranjos que la rodean, haciéndola casi inapreciable desde lejos e integrada en su entorno.

Guallart ha acudido a varias bienales de arte, a la de Valencia se le añade la de Venecia, donde ha presentado algunas de sus propuestas urbanísticas. También en el Moma de Nueva York y en el IVAM de Valencia, ambos prestigiosos museos de arte moderno.

Entre su proyectos más curiosos se encontraba la regeneración de una cantera en la montaña del castillo de Dénia. La idea del arquitecto, que llegó a ganar el concurso de ideas que propuso el municipio, era recubrirla con una cubierta vegetal con miradores que ocultaba un auditorio-teatro, un hotel balneario y un centro comercial con multicines. Todos con vistas al mar Mediterráneo.

El arquitecto de Sociópolis tiene ahora el reto más importante de su vida, dirigir el urbanismo de Barcelona, una de las ciudades más modernas de Europa. Eso sí, en plena crisis.