A las once en punto de la mañana unos veinte vecinos del barrio del Cabanyal-Canyamelar se concentraron, provistos de escobas, recogedores y bolsas de basura, en la calle José Benlliure. El objetivo era limpiar el barrio, "ya que el ayuntamiento no lo hace", sin embargo, para sorpresa de muchos, las calles marineras amanecieron ayer impolutas. No obstante, los vecinos no fallaron. Su reivindicación no desapareció junto con la basura, sino que se hizo más fuerte y a medida que pasaban los minutos iba llegando más gente al punto de encuentro, hasta llegar al medio centenar.

Así comenzó ayer la primera batida vecinal para limpiar las calles del barrio marítimo. Una acción que nació a partir de dos vecinas cansadas de ver las aceras sucias durante tanto tiempo. Y es que, según contó a Levante-EMV Celia Juan, una de las ideólogas de esta reivindicación, hacía "más de dos semanas" que no pasaban a barrer y lavar con agua la zona "a conciencia".

La acción se propagó por internet y con el boca a boca. Fue así como se enteró Luisa, una joven bibliotecaria que propuso a Celia que el acto tuviera repercusión mediática. "La solidaridad está muy bien, pero si las instituciones no se dan por enteradas, la situación continuará igual", sentencia escoba en mano.

"No se discrimina al Cabanyal"

La acción se desarrolló en plena polémica por la limpieza en la ciudad. El pasado viernes, la alcaldesa de la ciudad Rita Barberá dijo que el dinero que se destina, "un millón de euros a la semana" es suficiente para atender el servicio de limpieza. Ayer, fuentes del consistorio declararon que el ayuntamiento "no discrimina al barrio para que se degrade".

Lola, sin embargo, no lo tiene tan claro. Esta vecina de Canyamelar dice no notar ese millón de euros que se invierte desde el ayuntamiento en la limpieza de la ciudad. "Últimamente las calles aparecían casi igual que en los años 60, cuando no estaban ni asfaltadas", lamenta la vecina. "Parece que han aspirado las calles", añade Vicent Gallart, portavoz de la asociación.

Alrededor de las once y media de la mañana había unas 50 personas, escoba, recogedor o bolsa en mano, limpiando cada rincón de la plaza del Rosario. Mayores, jóvenes e incluso algún niño, acompañado de sus padres, colaboraba en esta acción solidaria y de protesta. Entre ellos se encontraba también Félix Estrela, concejal del PSPV en el ayuntamiento, que a título particular (ya que es vecino también del barrio), fue a echar una mano. Durante una hora más o menos la batida recorrió las principales vías del barrio, incluido un solar privado con la puerta abierta y lleno de escombros y basura. "Da vergüenza ajena ver tanta basura al lado del teatro El Musical y de la Iglesia", comentaba otra vecina. "El barrio está lleno de solares así, llenos de suciedad y de fácil acceso para los niños", sostenía Luisa.

La cifra de afluencia al acto fue "todo un éxito", según Gallart. Aunque la acción se originó en el rellano de una finca, el barrio ha respondido y no descarta volverlo a hacer si la situación continua.