El Ayuntamiento de Valencia ha recurrido a un certificado emitido por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) para eludir el pago de una indemnización de 1.015 euros por la caída de un árbol sobre un vehículo debido a la fuerza del viento. Miguel Ángel Caramel solicitó hace dos años la responsabilidad patrimonial para que el consistorio se hiciera cargo del coste. No obstante, con este documento, la administración logra probar que durante el hecho concurrió una "fuerza mayor" lo que legalmente le exime de correr con los gastos.

En un sentido jurisprudencial, "fuerza mayor" es cualquier hecho que, a pesar de previsible, es "inevitable, insuperable e irresistible", siempre que la causa que lo provoca sea "independiente y extraña" a la voluntad del presunto responsable.

Es precisamente a este punto al que el consistorio se ha aferrado para desestimar la solicitud de responsabilidad patrimonial presentada por Caramel una semana después de que una rama de árbol cayera sobre su coche cuando estaba aparcado en el chaflán de Pintor Nicolau con Floresta el 24 de febrero de 2010. Para ello, se le pidió a Aemet un informe sobre las condiciones climáticas de aquel día. Así, la agencia de meteorología aseguró que en aquella fecha se produjo un fenómeno meteorológico "extraordinario" bajo la forma de "una tormenta de máxima intensidad" que "forzosamente" tuvo que determinar la caída de parte del árbol sobre el vehículo del reclamante.

Miguel Ángel Caramel, en cambio, consideró que el clima adverso no había sido la causa de la caída de la rama, sino que esta tenía más que ver con causas terrenales, en concreto con que el árbol no estaba correctamente podado. Por eso, para determinar si la culpa era o no de las condiciones en las que se encontraba el árbol se solicitó un informe de los servicios de Jardinería y Paisaje, Policía Local, Plana Mayor y Bomberos. Sin embargo, la contratista del servicio de poda y saneamiento del arbolado público, Talher S.A., decidió solicitar el certificado de "fuerza mayor", por lo que recurrió a Aemet y así evitar que el ayuntamiento tuviera que sufragar los 1.015 euros de los daños.

Ahora Miguel Caramel tiene el plazo de un mes para presentar un recurso de reposición ante el concejal delegado de Responsabilidad Patrimonial, Félix Crespo. Además, Caramel también tiene otro canal para mostrar su disconformidad ya que puede presentar un recurso contencioso-administrativo en el juzgado pertinente de Valencia en un plazo de dos meses.