Las ventas de comercio minorista valenciano bajaron un 5,5 % en el conjunto del año pasado, según se desprende del informe publicado recientemente por el Instituto Nacional de Estadística (INE). En estas cifras se incluyen los resultados de las empresas de la Comunitat Valenciana con un sólo establecimiento, las pequeñas y medianas cadenas y las grandes superficies.

Este descenso es prácticamente igual al de la media estatal, situado en el 5,8 %. Además, se trata del cuarto año consecutivo en el que se registraron caídas en las ventas, es decir, desde que estalló la crisis económica. En 2008, el descenso interanual fue del 6,5 %, después de dos años de cierres positivos del ejercicio. El año siguiente la bajada fue mayor, del 8,5 %, y en 2010 del 2,1 %.

Esta situación de caída continuada es lo que más inquieta a los comerciantes, como confirman desde la Confederación de Empresarios del Comercio Valenciano (Cecoval), que aglutina a asociaciones sectoriales de muchos barrios y zonas comerciales de la ciudad de Valencia.

"Ya no quedan recursos"

Su presidenta, Isabel Cosme, explicaba que "lo dramático no es tanto una disminución sino la duración de varios años. Otros años en los que hemos cerrado con malos datos los hemos afrontado con nuestros recursos, saliendo adelante". Pero el problema es que "ya no quedan recursos propios ni ajenos".

El origen de esta situación reside en "la incertidumbre del consumidor", que ante la falta de confianza prefiere ahorrar antes que consumir.

El 2011 ha sido "un año muy difícil, sobre todo al final. Empezamos los primeros meses pensando que la cosa arrancaba pero enseguida se frenó. Este año el sector más perjudicado ha sido el textil".

El mismo informe del INE indica que el empleo en el comercio al por menor ha descendido un 1%, seis décimas superior a la media estatal. Cosme señala que "el ajuste de personal ya está hecho" y que han "adelgazado" estructuralmente. Las pérdidas se traducen en cierres de negocio, que indica han sido continuos en los últimos años. Afrontan este año como el de la "supervivencia". Las cifras del estudio señalan que en España las empresas de un sólo establecimiento han tenido una bajada de las ventas del 7 %, aunque las grandes superficies y las pequeñas cadenas han registrado un 7,2 %.