El centro público Lluis Guarner acoge de lunes a viernes a un total de 420 alumnos de diferentes edades. Enclavado en el barrio de Benicalap, es uno de los centros que este año se ha visto afectado por el recorte del 15 % en el presupuesto de la contrata de limpieza en los colegios aprobado por el ayuntamiento de Valencia. Dos personas se encargan de la pulcritud de las instalaciones -con un refuerzo de cuatro horas durante dos días- y los padres califican la dotación de "insuficiente". Por ello, la Asociación de Padres y Madres de Alumnos (AMPA) convocó a principios de semana una jornada popular para adecentar las aulas a fondo, tal como hicieron semanas atrás sus homólogos en el Cervantes. Pidió los pertinentes permisos a Educación y movilizó a sus integrantes. Sin embargo, esta vez la Generalitat denegó la iniciativa por "no ajustarse a la normativa", mediante una carta enviada el viernes al mediodía. No había espacio para la participación paterna en la limpieza.

Las fregonas, las escobas y los recogedores se quedaron a las puertas. Así como la sensación de intranquilidad entre los progenitores por la presunta escasez de higiene en unas instalaciones que sus pequeños visitan día tras día. Intranquilidad que ha llevado a algunos de los padres a cuestionar la salubridad del centro, sobretodo aquellos con hijos en edad infantil, que sospechan de un brote vírico aparecido de forma reciente. Aunque de momento prefieren conservar el anonimato, aseguran que once de los veintiún escolares con edades entre tres y cinco años han enfermedado en las últimas semanas. Incluso apuntan casos de alumnos que han encadenado tres infecciones seguidas. También se ha tenido que medicar, al menos, una profesora. La situación ha provocado que los padres hayan acordado analizar las heces de sus pequeños para cribar el origen de la infección.

A su vez, los afectados también denuncian falta de consumibles de limpieza básicos, como papel de WC o jabón. Uno de los padres comentó que "desde hace dos o tres semanas acompaño el almuerzo de mi hijo con un rollo de papel y una botella de jabón; así está la situación".

Un toque de atención

Aunque el número de casos puede definir un claro cuadro de infección grupal, desde la AMPA prefieren ser cautos. Paco Iniesta, vicepresidente de los padres, comentó que "el problema es general, ya que notamos la falta de limpieza desde hace tiempo; no tenemos pruebas sobre una supuesta infección en infantil que podría venir de fuera". Consultado sobre posibles nuevas movilizaciones, el portavoz de los padres declaró que "de momento preferimos esperar a vér que pasa, queríamos que la jornada de limpieza fuera un toque de atención para denunciar la situación que sufrimos; a ver si nos hacen caso y se arreglan los problemas". De momento, la AMPA ha decidido esperar los movimientos de Educación. El inspector de zona visitó e inspeccionó las instalaciones del centro público el pasado viernes.