Con guiños al gótico tardío veneciano, piscinas minimalistas, escaleras de cristal de Swarovski y nombre dedicado a la actriz Sophia Loren, la compañía MSC presentó ayer en Valencia a su supercrucero "Divina", un gigante capaz de trasladar a 4.363 pasajeros en sus 1.751 camarotes.

Era una escala "importante" para la compañía dentro del viaje preinaugural del buque, que será finalmente bautizado mañana en Marsella con presencia de la famosa actriz italiana, madrina de todos los barcos del grupo.

El MSC "Divina" es la tercera pieza de la familia "Fantasía" y destaca tanto por sus dimensiones como por sus acabados. Aunque las cifras son mareantes, cabe resaltar sus 30.000 metros cuadrados de espacios públicos, siete restaurantes, 20 bares y salones, cuatro piscinas, un gran teatro y un casino, todo ello repartido por sus 18 cubiertas (catorce de ellas para pasajeros) y dentro de sus 333 metros de eslora.

En principio, este buque se destinará al Mediterráneo más oriental, con periplos que unirán Bari, Estambul, Dubrovnik y Venecia. Pero desde el próximo mes de julio estará más cerca de Valencia con la inauguración del vuelo entre la ciudad del Turia y la capital italiana.

Es, por tanto, también una muestra del compromiso de MSC con Valencia, tal como destacó su director en España, Emiliano González, que recordó la apuesta realizada por la compañía en 2006 y la consolidación posterior de su ruta semanal. De hecho, el pasado ejercicio aportó 60.000 de los 400.000 "cruceristas" que recalaron en este puerto y para 2012 esa cifra puede aumentar a 90.000. Y es que, según dijo Emiliano González y corroboró el director de la Autoridad Portuaria, Ramón Gómez Ferrer, "los mejor está por llegar".

Por lo que a él le toca, Gómez Ferrer anunció que ya han comenzado las obras de la nueva terminal de cruceros de Valencia (el "Divina" tuvo que atracar ayer en el dique del Este) y que el año que viene entrará en funcionamiento. Tendrá dos atraques de 400 metros, aparcamiento, conexiones con la red vial del puerto y la estación propiamente dicha, donde al principio habrá un servicio mínimo de restauración y tiendas que se incrementará según avancen las capacidades económicas, dijo.

Esta terminal forma parte del Plan de Cruceros de Valencia, con el que se quiere llegar a un millón de visitantes en 2020.