Dos meses después de que se celebrara el Gran Premio de Europa de Fórmula 1, el tráfico del puerto de Valencia y su entorno sigue siendo un caos. Rotondas improvisadas, calzadas cortadas o desdobladas, ausencia de señalización etc. complican la circulación y, especialmente los accesos a las terminales de viajeros de Acciona Trasmediterránea y Balearia, cuyos clientes han expresado sus quejas por las dificultades para llegar a sus destinos. La Autoridad Portuaria de Valencia, sin embargo, se ha limitado a decir que esos problemas son responsabilidad de Valmor, empresa que gestiona el circuito, y del Consorcio Valencia 2007, que gestiona la Marina Real Juan Carlos I, eludiendo cualquier pronunciamiento al respecto.

Ya dos meses antes de que se celebren las carreras, el montaje del circuito obliga a reordenar el tráfico rodado entre la Plaza de la Armada Española, al inicio de la calle La Reina, y el Puente de Astilleros, en la salida hacia Nazaret. Eso es un tramo de más de un kilómetro que incluye las calles Doctor J. J. Dómine e Ingeniero Manuel Soto, con las entradas y salidas de tráfico de la Avenida del Puerto y Juan Verdeguer respectivamente. Además, la reordenación afecta tanto al interior como al exterior de las instalaciones portuarias.

Pues bien, dos meses después de las carreras la situación no ha cambiado mucho en este sentido. Ya no hay gradas ni neumáticos, ni tampoco las vallas del circuito, pero el caos de tráfico sigue siendo similar. Las calzadas y las rotondas están formadas con vallas; alternan las calzadas normales con las del circuito, todo ello sin señalización de accesos ni sentidos; las zonas de aparcamiento y las carreteras se separan con maceteros y encontrar la salida y entrada al puerto es a veces una tarea imposible.

Esta situación afecta a todo el tráfico, al que va por dentro del recinto portuario y al que va por fuera, siendo especialmente perjudicados los camiones que acuden a recoger mercancía y los pasajeros que necesitan llegar a las terminales de Acciona-Trasmediterránea y Balearia. Para este segundo caso es necesario incluso pasar un control portuario.

El puerto calla

Frente a esta situación, la Autoridad Portuaria de Valencia evita pronunciarse y únicamente traslada la responsabilidad a quienes tienen la responsabilidad del circuito: el Consorcio Valencia 2007, que se encarga de la gestión de la Marina Real Juan Carlos I y, por tanto, da los permisos, y la empresa Valmor Sport, que es la encargada de la organización del Gran Premio de Europa de Fórmula 1 y del montaje del circuito urbano.

Según fuentes del puerto, "son ellos los que deben resolver estas cuestiones del circuito. El puerto no tiene nada que ver en eso", recalcaron. De Valmor y del Consorcio no ha sido posible recabar una opinión al respecto.