En un edificio en la plaza de alfonso el magnánimo, más conocida como Parterre, un vecino ha abierto una irregular hilera de 14 metros de ventanas en una pared medianera. De hecho, en la imagen junto a estas líneas se ven los pequeños ventanucos, en la parte superior, que son los que, según los vecinos, están autorizados. Las mismas fuentes destacan que desde la calle, en pleno centro histórico protegido, no se ven las ventanas abiertas en la pared, lo que, especulan, ha evitado una inspección municipal que no superaría la hilera de lucernarios. El edificio fue rehabilitado al completo y entonces quedó a la vista el ventanal.