Nunca una asamblea de presidentes de falla había suscitado tanta expectación. Apenas 55 comisiones estuvieron ausentes del hemiciclo. Lo nunca visto en la fiesta: el 86% del censo acudió a la llamada de las urnas.

Si al habitual poder de convocatoria de elegir a los jurados de las falleras mayores de Valencia se unía la satisfacción de estampar un «No» en las papeletas contra el cambio de fechas de fallas, no es de extrañar que la asistencia así de espectacular.

Ese debate se había agotado en la asamblea de la pasada semana y sólo quedaba la materialización de la negativa por medio de las papeletas: 288 presidentes en contra por tan sólo 30 a favor y cuatro abstenciones. La votación se recibió con una sonora ovación.

Mientras, llegaba el otro tema importante que afecta a la fiesta, pero una vez más quedó demostrado que esto no parece preocupar demasiado al parlamento fallero o que no hay más capacida de reacción: la subida del IVA en el monumento. El concejal Francisco Lledó recordó que «al final nos dicen que no pueden aceptar nuestra pretensión de aplicación deel tipo reducido. Lo dice el secretario de estado de Hacienda y lo justifica en la mala situación económica y por la decisión en la Unión Europea de no aplicar reducciones. Nosotros seguiremos trabajando en que esto se cambie. No es una cantidad excesiva como para nutrir a las arcas del estado (son unos 800.000 euros) y, sin embargo, para nosotros sí que es importante. Ojalá pueda ser reconsiderada esta postura» aseguró, aunque con poca convicción.

La reacción fue extraordinariamente tibia: sólo dos presidentes se refierieron al tema. «Esperaba que diera alguna solución más» le espetó el de Santa María Micaela, quien sugirió la redacción de un manifiesto de todas las fuerzas vivas de todo el arte efímero para hacer una iniciativa legislativa popular. «Si pasamos página, el 21 por ciento no nos lo va a quitar nadie. Si hemos venido con los deberes hechos con lo del 19 de marzo, ahora les toca a ustedes hacer ese esfuerzo y nosotros también lo haremos. Mándenos el manifiesto y cada falla le traerá 300 o 400 firmas y cuando venga el ministro de turno a la mascletà, no será bien recibido». Aplausos en el foro. Se molestó Lledó. «Un humilde concejal poco puede solucionar de una decisión estatal. No se puede hacer de cada cosa una iniciativa legislativa. Pero lo que hagamos tiene la misma fuerza que si la hago yo solo».

Sólo se desgrava publicidad

El presidente de San Vicente Periodista Azzati pidió un servicio de asesoría jurídica para poder desgravar IVA soportado y sugirió la aplicación de presupuesto cero para que no se generara un euro de Iva. Lledó rechazó esta opción, pero sí que dijo que «el Iva soportado y el repercutido sería muy difícil de aplicar en casi todas las fallas. No podríamos repercutirla, por ejemplo, en las cuotas. Sólo en los patrocinadores. Y eso sólo lo podrían hacer las fallas más poderosas. Y si no llega a 20.000 euros, difícilmente se puede repercutir. Y cuando se hace esa declaración también se prorratea según los ingresos. Si tengo 100.000 euros de ingresos y 20.000 con el IVA tendrían que hacerlo sobre esta cantidad y a partir de tres años. Se necesitaría una contabilidad perfecta y no conseguiríamos nada». Algunas comisiones llevan ya un tiempo estudiando las posiblidades de conseguir esos beneficios fiscales.

Jurado: barren los presidentes

En el jurado de las falleras mayores barrieron los presidentes de falla. En infantiles están los dos que se habían presentado, Oscar Mollá y Jesús Hernández junto a Vicente de Castro, Enrique Salvador y Ximo Estevbe de la JCF. En mayores, Beatriz Ramos se queda sola ante cuatro presidentes: Julián Caballero (padre de la fallera mayor 2011, Laura Caballero), José Pastor, José Antonio Pérez Casas y José Davia.

En este caso, con una anécdota: Beatriz Ramos y José Antonio Pérez repiten presencia como en 2004, pero ahí, ella era candidata a fallera mayor y él era presidente.