Es «una de tantas» deficiencias que tiene el barrio, explica Alfonso Cortés, presidente de la Asociación de Vecinos de Malilla, pero es una de las más destacadas. En el barrio, uno de los más poblados de Valencia con más de 20.000 habitantes, únicamente hay ocho parques infantiles. Según el Anuario Estadístico de la Ciudad de Valencia, en Malilla hay 3.616 menores de 15 años, lo que da un parque cada 452 niños.
Los vecinos critican la falta de infraestructuras en el barrio, uno de los más abandonados según ellos. Sin embargo, se trata de una zona muy poblada, por lo que en su opinión la ausencia de parques infantiles es una de las deficiencias más importantes. Además, algunos de los parques son poco más que dos columpios. En la calle Guillem Jàfer, por ejemplo, son dos columpios y un tobogán. La situación es muy parecida en los parque situados junto al Bulevar Sur.
En otros casos, sí que es cierto que las instalaciones son mejores, como por ejemplo en el caso de Escultor Víctor Hino, en cuyo parque hay una especie de castillo en el que los niños pueden subirse.
Sin embargo, el descontento en el barrio es patente con la saturación que presentan las instalaciones infantiles. No es, como dice Cortés, la única deficiencia del barrio, pero sí es una que afecta a un sector de la población, los menores de 15 años, que representan una parte importante de Malilla.
