Verde de arriba a abajo

Una cosa es una ocurrencia o una humorada. Y otra es tener que defenderla sin hacer el ridículo. Eso es lo que le ha pasado al artista José Acebes, que se encarga de plantar la falla de Sevilla-Denia, y que está caracterizada por estar realizada íntegramente en color verde, dentro de la tematización general del ejercicio.

Porque crear un año verde, con actos donde todos visten de verde, donde la comida es verde, se haya creado el carnet verde, los polares sean verdes o hastas las redes sociales tengan la letra verde. Otra muy distinta es afrontar artísticamente el proyecto. Acebes reconoce que "el tema se planteó en la primera junta de la falla. Fue una cosa del presidente, Carles Galiana. Al principio yo dije que no, pero, sinceramente, ahora ya no la concibo de otra manera". Y es que Acebes es fallero de la comisión ruzafeña, razón por la que fue ahí donde, el año pasado, debutó con fallas grandes. Su larga experiencia con fallas infantiles le permitió acudir a las fallas grandes con la suficiente experiencia como para dar el salto sin estar... verde, claro.

Hacer una falla toda verde no es fácil "porque ha habido que jugar con las tonalidades. Y podía quedar muy bien o rematadamente mal. Cada ninot, y cada rincón de un ninot, tiene su propia textura y, por consiguiente, su propio color verde. No hay duda, es mucho más sencillo hacer una pintura más realista y variada. Pero una vez afrontado, ha sido apasionante". En un tiempo en el que las fallas innovadoras reclaman más protagonismo y más respecto al concepto que defienden, esta falla tiene, en sí misma, su concepto de originalidad. Y la apuesta es lo suficientemente sólida como para saltar desde la Séptima A a la Cuarta B, una de las mayores subidas del año.

Diez colores para jugar

"Todo son mezclas, pero he trabajado con diez colores diferentes. No todo se reduce a lo de juntar azul y amarillo. He trabajado con ocres, blancos y muchos más para ir ampliando la gama. Ha sido un auténtico trabajo de experimentación del que estoy muy satisfecho. Nunca había hecho nada parecido". El monumento jugará con las palabras y su concepto verde y también tendrá una escena totalmente fuera de ese contexto verde precisamente para jugar con el contraste.