El abandono del monasterio de San Vicente de la Roqueta y la pasividad de Ayuntamiento y Arzobispado ante la que pasa por ser la «ecclesia mater» de Valencia ha provocado la disolución de una de las cofradías más importantes del movimiento vicentino y ha empujado al párroco de Cristo Rey a liderar una fundación que atraiga el mecenazgo al estilo de lo que se hizo con la Basílica de la Virgen.

Ayer mismo la Asociación-cofradía de San Vicente Mártir anunció su disolución «dejando en manos del ayuntamiento y el Arzobispado de Valencia la responsabilidad de la pérdida de un lugar tan emblemático del pueblo valenciano como es el monasterio de La Roqueta».

Para Rosa Araixa, presidenta de la entidad, el sentido de la asociación es rehabilitar el monasterio y dedicarlo a la memoria del santo, empezando por excavar el templo constantiniano y recuperar los restos del santo que se supone que hay en el subsuelo. El traslado de la biblioteca municipal de la Plaza de Maguncia no le parece una mala idea, pero «no era nuestro objetivo», dice.

«Careciendo pues de estos objetivos y de apoyos por parte de las instituciones políticas y eclesiásticas valencianas», la asociación considera que «no tiene sentido su permanencia».

Rosa Araixa cree que la festividad del día 22 de enero, con una misa y una procesión, no hace justicia a la que se considera cuna del cristianismo valenciano. Y tampoco cree en la idea de crear una fundación para suplir el papel de las entidades públicas, que es el camino que han defendido otras cofradías hermanas y que ha iniciado el párroco de la iglesia de Cristo Rey Ángel Pedro Fernández.

Entidades invitadas

Recientemente ha quedado constituida una comisión gestora encargada de crear la que será la Fundación de San Vicent de la Roqueta, destinada a salvar el templo „la «ecclesia mater» valenciana en palabras del historiador y canónigo mossén Vicent Castell Maiques„ y lo que queda del monasterio.

A la Fundación estarán llamadas aquellas instituciones y entidades con responsabilidad sobre el patrimonio histórico-artístico, así como empresas y particulares que realmente estén interesadas en salvar el cenobio e iglesia que desde los primeros siglos del cristianismo ha estado abierta al culto, y que en la edad media fue lugar de peregrinaciones procedentes de todos los lugares de Europa, por estar enterrados allí los resto de San Vicente Mártir, el primer santo martirizado del cristianismo valenciano.

De esta forma, se va a invitar a integrarse en la fundación al Ayuntamiento de Valencia, al Arzobispado, a la Universidad Politécnica, a la Universidad Católica san Vicente Mártir, a los Colegios de Bellas Artes y Arquitectura, a instituciones dedicadas al mecenazgo y a aquellas personalidades interesadas en la defensa del patrimonio histórico-artístico valenciano. Se va a poner en marcha incluso una suscripción popular basada en el lema «Un valenciano, un euro».

La iniciativa la ha tomado el párroco de Cristo Rey al ver que todo el mundo está siempre hablando de salvar La Roqueta, pero nadie hace nada por ella, a pesar de ser el centro religioso cristiano más antiguo que queda en pie, aunque muriéndose a marchas forzadas.

El Ayuntamiento de Valencia, que tiene la titularidad del Monasterio de la Roqueta, aunque no de la Iglesia, se ha abstenido de recuperarla y está dejando que se derrumbe con su pasividad e inacción. Es más, en los años 70 del pasado siglo estuvo a punto de vender la parte conventual para que allí se levantaran edificaciones modernas, cargándose la historia del venerado lugar.

En la actualidad y después de que 20 organizaciones vicentinas firmaran un manifiesto por la rehabilitación de la Roqueta, se están acometiendo obras de rehabilitación de la parroquia y de consolidación del monasterio, que ha estado apuntalado dos décadas.

Presentación el día 22

La comisión gestora tiene ya ultimado el borrador de los Estatutos de la Fundación, que serán presentados oficialmente el 22 de enero, día de san Vicente Mártir, momento en el que comenzará a andar el instrumento que se pretende ataque definitivamente la restauración y rehabilitación de La Roqueta.

Ayer Francisca Llosa, presidenta de Valencia Cultural-Vía Augusta y Camino de San Vicente Mártir e impulsora también del manifiesto citado anteriormente, mostró su disposición a colaborar con esta fundación, en cuyo germen estuvo la entidad que ella preside, así como otras entidades culturales valencianas.