El arzobispo de Valencia, Carlos Osoro, exhortó ayer en la misa del Corpus Christi a "estructurar eucarísticamente" la existencia, lo que significa que la vida "es para darla, no para retenerla, es para compartir lo que se es y se tiene con los demás, no para aprovecharse de ellos". Durante su homilía en la catedral, Osoro insistió en que "estructurar la vida desde la Eucaristía es parte esencial para afrontar cualquier situación que sobrevenga", porque implica "que no se puede hacer lo que a uno le dé la gana, sino que siempre tiene que ver en el otro un hijo de Dios, al que hay que procurar que se desarrolle y crezca". "Y esto tiene unas consecuencias tremendas de todo tipo respeto a la vida mía y la de los demás", agregó.

El prelado resaltó que la fiesta del Corpus Christi "invita a recordar que Dios está aquí" y destacó que el Real Colegio Corpus Christi El Patriarca es "un recuerdo permanente en Valencia de la presencia real del señor en la eucaristía". Además, la fiesta del Corpus Christi es "muestra del amor de Dios y de su compasión" y, según Osoro, muestra que "necesitamos pasar del comprar al compartir", apelando a intensificar la colaboración con Cáritas.

Autoridades en el primer banco

En la misa participaron el presidente de las Corts, Juan Cotino; la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, así como buena parte de la corporación municipal; el teniente general jefe del Cuartel General Terrestre de Alta Disponibilidad, Rafael Comás, y el rector de la Universidad Católica de Valencia San Vicente Mártir, José Alfredo Peris, entre otras autoridades. Durante la ceremonia religiosa intervino la Coral Catedralicia que interpretó la misa "Dona nobis pacem", de Mª José Erb.