El rinoceronte blanco del viejo zoo de Viveros se jubila. Así lo han decidido los responsables de Bioparc Valencia, el zoológico de nueva generación construido en el Parque de Cabecera al que el animal fue trasladado hace seis años. El rinoceronte, conocido como «Rómulo», fue trasladado el miércoles en un transporte especial por carretera hasta la Reserva del Castillo de las Guardas, un parque ubicado a 58 kilómetros de Sevilla inaugurado hace diez años que combina la exhibición de animales de distintas especies con otras actividades lúdicas y de restauración.

El argumento para trasladar al viejo rinoceronte a Sevilla es que no cumplía la función de macho encelador del grupo reproductor de rinocerontes del Bioparc. Además, el animal no ha sido capaz de superar el problema de estereotipia „conducta repetitiva„ que sufría y que le hacía andar el círculos recordando el perímetro del estrecho cubil que ocupó durante 23 años en el viejo zoo de Viveros, desmantelado tras la apertura del Bioparc. Las terapias de los veterinarios para romper la estereotipia no han dado el resultado esperado.

El rinoceronte blanco fue uno de los primeros animales en llegar al Bioparc procedente del antiguo zoo de Viveros. Es además el ejemplar de más edad de los cuatro que habitaban en el parque y uno de los más entrañables para los valencianos, que han podido verlo primero en Viveros y posteriormente en Bioparc.

Rómulo tiene 39 años y nació en Inglaterra. Con 11 años fue trasladado al zoo de Viveros donde no había más animales de su especie. Aunque nada pueda igualar a la vida en estado salvaje, el traslado del rinoceronte a Bioparc mejoró considerablemente su calidad de vida en detalles como tener un recinto con el suelo de arena y no de cemento como el que tenía en Viveros. Según explicaron fuentes de Viveros, el animal recibió atención especial, en concreto, un programa de enriquecimiento ambiental. Además, desde su recinto exterior tenía contacto visual constante con las dos hembras y el otro macho, puesto que desde el programa de reproducción (EEP) del rinoceronte blanco sureño se consideraba que debía desempeñar un importante papel como macho «encelador».

Sin embargo, los cuidadores han constantado que en lugar de cumplir su función estimuladora, sucedía lo contrario, es decir que el rinoceronte de Viveros inhibía la correcta reproducción del otro macho.

Ante este hecho, «se decidió trasladar a Rómulo un nuevo destino, asegurándose previamente que fuese adecuado para que siguiese el proceso de mejora de su estereotipia», apuntaron fuentes de Bioparc.

Para evitar al máximo el estrés del viaje, el rinoceronte ha sido entrenado durante semanas para entrar de forma voluntaria en el cajón de transporte. El viaje por carretera hasta Sevilla, que se hizo el miércoles por la noche para evitar las horas de más calor, fue supervisado por los cuidadores y veterinarios. El nuevo hogar de Rómulo tiene 230 hectáreas. El recinto que ocupará tiene 13.000 m2 y una charca de agua.