El Saler sigue perdiendo playa pese a las inversiones

El mar gana terreno a la costa donde se invirtieron 600.000 euros para recuperar el litoral después del rescate de los dos buques varados

adrià calatayud valencia

La playa del Saler va a menos. La de la Garrofera, donde los buques "Celia" y "BSLE Sunrise" quedaron varados tras el temporal del pasado 30 de septiembre, ha vuelto a retroceder. El mar ha recobrado el terreno que ocupaba antes de los trabajos de recuperación del litoral que siguieron al rescate de los barcos encallados, en los que se invirtieron más de 600.000 euros, sufragados por los armadores de los barcos, y que culminaron el 15 de febrero. En apenas medio año, la playa ha quedado reducida prácticamente a la nada. Ayer, escasos metros separaban la línea de costa de las dunas.

La liberación de los buques Celia y Sunrise obligó a retirar 49.000 metros cúbicos de arena de playa que quedaron bajo los barcos, más otros 12.000 metros cúbicos del agujero hecho por las hélices de este último. En las labores de recuperación, se reubicó esta arena y se añadieron otros 12.000 metros cúbicos procedentes de El Perellonet. Además, se plantaron 15.000 especies vegetales propias de la zona, palmito y margalló, para restablecer el cordón lunar y se recuperó el fondo marino afectado.

Invasión de las dunas

Algunos de los chiringuitos de las playas del Saler se encuentran instalados sobre las dunas. Dado que los bañistas ocupan la casi toda de la superficie disponible, los chiringuitos, autorizados por el Ayuntamiento de Valencia, no han tenido más remedio que recular hasta asentarse sobre el cordón dunar. Su invasión prueba la escasez de playa. Porque la recuperación de las dunas del Saler era uno de los objetivos de las inversiones de los armadores, incluso el ayuntamiento colocó carteles alertando a los visitantes de que se trataba de un espacio protegido de gran sensibilidad y que no se debía pisar.

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