«Valencia es la ciudad ideal para ir en bicicleta, es llana y tiene buen clima», afirmaba José Saurí, presidente del Bici-Club de Valencia, ayer después de una exitosa 17ª edición del día de la bicicleta en la ciudad del Turia. Valencia despertaba en domingo, soleada y tranquila a las 10 de la mañana, para dar comienzo al paseo en bicicleta. Como si de una migración se tratase, 15.000 ciclistas conformaron una marea de cascos y camisetas de colores fluorescentes hacia el puerto. La ruta tenía como punto de partida el Puente del Real, y desde allí, los participantes, récord este año, recorrieron la avenida del Puerto hasta el edificio Veles e Vents para dar la vuelta por el circuito de Fórmula 1 hasta volver al Paseo de Alameda y al punto de encuentro.

En el día sin coches, el Bici-Club de Valencia organiza desde hace diecisiete años esta carrera con la colaboración de la Fundación Deportiva Municipal y el patrocinio principal de El Corte Inglés. Esta marcha en bici, de 10 kilómetros, tiene un objetivo solidario. Cada participante pudo colaborar inscribiéndose en la carrera por un euro, de manera voluntaria, que se destinará a uno de los proyectos de ayuda a la infancia de Unicef, en este caso contra la poliomelitis. Así, los miles de ciclistas se tradujeron en algo más de quince mil euros para esta causa. Con la inscripción los participantes optaron también al sorteo de diez bicicletas.

La masa ciclista, todo un río de heterogeneidad y color, destacaba por la gran cantidad de familias. Los niños eran protagonistas, algunos con sus propias bicis, y los más pequeños, en sillitas colocadas detrás del sillín de sus padres o en carritos remolcados por las bicis. Pilar, una de las madres, afirmaba que «traer a los niños a la carrera significa educarles en un modo de vida saludable». Además, muchos de los participantes, con gran presencia de la juventud, recorrieron la ruta formando pelotones de asociaciones de vecinos o clubes ciclistas. José Ramón Sánchez, presidente de una asociación de vecinos de Xirivella, participó junto a veinticinco socios más para «reivindicar la bici como medio de transporte y sobre todo apoyar la causa de Unicef», declaraba.

El Paseo de Alameda inundado de ciclistas „entre música, bebidas gratuitas y el sorteo de bicicletas„ daba por finalizada la mañana de domingo ciclista, en uno de los actos de Valencia por el día sin coche.