La Asociación de Comerciantes del Centros Histórico presentó ayer en el Ayuntamiento de Valencia su proyecto de pista de hielo para esta Navidad, cuya característica principal es que ocupará sólo media plaza para dejar libre el árbol. No es lo que querían pero sí servirá como «prueba piloto» para el año que viene, cuando esperan volver con esta idea pero mejorada.

Según explicaron fuentes de la asociación, la falta de tiempo y las condiciones del Ayuntamiento de Valencia han complicado mucho el montaje. Concretamente, los responsables municipales pidieron que el árbol de Navidad se mantuviera en el centro de la plaza y se dejara un pasillo de entrada para acceder al mismo y poder hacerse las tradicionales fotografías, lo que exigiría, además, dejar un espacio de cinco metros alrededor del árbol.

Los técnicos, sin embargo, creen que con ese «corte» es muy complicado enfriar toda la pista, de manera que la solución ha sido ocupar únicamente la parte derecha de la plaza, la que está frente a Correos, con una caseta para el alquiler de patines que se colocará junto a las floristerías.

Las dimensiones de la pista, según las fuentes, serán de 30 metros por 25 y existe aún la duda de si se dividirá en dos partes para adultos y menores.

Por lo que se refiere al suministro eléctrico, el proyecto prescinde de generadores y cuenta con el enganche en la red eléctrica normal, por lo que ya se está negociando la conexión con la compañía Iberdrola.

En la otra mitad de la plaza no está previsto poner nada. Ya se dijo que se renunciaba a instalar un mercadito de Navidad y esa idea se mantiene. Probablemente se haga otro año, porque en realidad todo lo que se haga esta Navidad servirá como experiencia piloto para años posteriores, en los que se tomarán más tiempo para mejorar el montaje.

De todas formas, el proyecto presentado en el Ayuntamiento tiene que ser visado ahora por los técnicos y, en caso de ser aprobado, se calcula que podría empezar a funcionar el 12 de diciembre.