El Rotary Club de Valencia, fundado en 1928, fue casi el que hacía tres mil de estos clubes en todo el mundo, y el catorce de España en aquellos tiempos. Ha cumplido, pues, 86 años. Fue presidido en su creación por José María Lamo de Espinosa, y en su primera junta figuraron personalidades de la ciudad en aquellos tiempos, como Federico Doménech, Ernesto Ferrer, los Gómez-Novella, Tomás Trénor Azcárraga que en la década de los cincuenta sería alcalde de la ciudad e incluso Nicolás Franco Bahamonde, que entonces presidía la Unión Naval de Levante.

En el transcurso de estos años pronto será un siglo se creó una distinción que en estas últimas fechas ha supuesto seis lustros de existencia, pues nació en 1984 la ya popular y famosa «Llama rotaria», distinción con la que se premia a personalidades de las diferentes actividades públicas y ciudadanas, tal como recoge el reciente libro del que fue presidente del Rotary Club Valencia en 1994, el escritor y montañero José Soler Carnicer. El libro, resumen de la actividad de este club sin ánimo de lucro, fue presentado recientemente como prólogo a la entrega de la «Llama rotaria» de 2013, en una sesión presidida por el actual titular del club, Vicente José de Diego, y en la que efectuó la presentación el rotario Román Amador, junto con el propio autor.

Más de un centenar de personalidades han recibido esta distinción, relación que resulta larguísima, y que puede contemplarse en el libro que comentamos. Pues aparecen figuras de los más diferentes sectores, desde la ciencia y la docencia Julián Sanvalero, Domingo Fletcher, Eduardo Primo Yúfera, Santiago Grisolía, Secero Ochoa, José López Ibor, los hermanos Gómez-Ferrer Bayo; destacadas personalidades de las Bellas Artes Antonio Sacramento, José Esteve Edo, Juan Reus, Aguilera Cerni, Alex Alemany. Y en muy diversas facetas, como la Economía, los valores humanos, todo lo que haría una lista interminable se puede tener completa en el libro citado; sin olvidar el mundo del espectáculo y la música, donde aparecen Amparo Rivelles, Fernanda Docón, Luis Sánchez Polack, «Tip», Antonio Ferrandis, Luis García-Berlanga, Joaquín Rodrigo,?

La relación resultaría larguísima para un reportaje, y todos los reseñados en la obra de Soler Carnicer tienen un nombre y un renombre universal, que con el centro en Valencia han merecido tal reconocimiento.

Tras la presentación del libro aludido, días más tarde se procedió a celebrar la sesión de investidura de los merecedores de la «Llama rotaria» del año 2013, que en esta ocasión han sido José Pérez Calatayud, en la especialidad de Ciencias, José Luis Marín Carbonell, en Docencia, Francisco Martínez Cosentino, en Economía, y Pascual Parrilla Paricio, en Valores Humanos.

En fin, unas actuaciones que merecen ser destacadas y resaltadas y que lo son con la «Llama rotaria», y que deben ser aireadas, pues ya sabemos que «no se enciende la vela para colocarla debajo del celemín, sino encima de la mesa para que alumbre».