La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, ha hecho un llamamiento "a la solidaridad, a la colaboración y a que no se mienta" sobre el centro de Casa Caridad para la atención de convalecientes sin recursos que ha generado polémica y el rechazo de un grupo de vecinos del barrio de Benicalap donde se ubicará.

Barberá ha realizado estas manifestaciones tras presidir la entrega de diplomas de un programa de becas de formación para titulados en empresas, al ser preguntada por la reunión que mantuvo el pasado viernes con el presidente de esta institución benéfica, Antonio Casanova.

Las obras de este centro de atención sociosanitaria, en el que invertirán casi cinco millones de euros y debería estar operativo a primeros de 2016, fueron paralizadas a primeros de mes por las protestas de un grupo de vecinos que aseguraban que degradaría al barrio al dispensar metadona a personas drogodependientes.

El pasado viernes, Casanova visitó a la alcaldesa para contarle que se había reunido con el grupo de vecinos que no quiere ese centro para darles todo tipo de explicaciones y le dijo que "iban a agotar todos los medios de información y explicación y que estaban abiertos al diálogo".

"Llamo a la solidaridad, a que no se envenene más a quien lo está haciendo por razones absolutamente espurias y fuera de lo que es el objetivo de Casa Caridad", ha pedido Barberá, que ha recordado que este centro "pionero" tratará a convalecientes, familias y niños y "no hay nada de lo que se está diciendo para engañar y manipular".

Barberá ha asegurado que es "mentira" lo que dicen de que van a llevar allí a los mendigos de los jardines del MuVIM y ha reiterado su llamada a "la solidaridad, la colaboración y que no se mienta".

"Son mentiras continuadas y cada vez que se desmonta una se inventan otra por una insolidaridad u otras razones que no quiero ni pensar que sean verdad pero que las descubriré", ha concluido.