La Associació de Veïns i Veïnes de Natzaret denunció ayer «toda la suciedad arrastrada hasta el río Túria», con motivo de las últimas lluvias registradas, visible desde el puente de Astilleros.

Según criticó el colectivo vecinal, «la solución hidráulica de los desagües recogidos por el viejo cauce del río, así como las soluciones técnicas que eviten su contaminación, están por estrenar». En este sentido, se reiteró que éste «era el compromiso adquirido por el ayuntamiento y el Puerto el 19 de mayo de 1986 en el artículo nº 9 del convenio de colaboración para la ordenación del entorno portuario y su relación con la ciudad, incumplido a fecha de hoy, 28 años después de la destrucción de la playa de Natzaret en favor de la ampliación sur del Puerto».

El portavoz de la asociación, Julio Moltó, advirtió que «el cauce histórico vuelve a tener agua a partir del puente del Assud de l'Or por las aportaciones periódicas de la renovación de los depósitos del Oceanogràfic, así como de los aliviaderos del colector norte, de la estación elevadora e impulsora de agua residuales de Cantarranas y de Natzaret; a lo que hay que añadir la entrada de agua de mar a través de tres tristes tuberías que rematan de forma indigna el final del viejo cauce de la capital del Túria a su llegada al Puerto».

Por todo ello, la agrupación vecinal de Natzaret denunció «el desinterés de los actuales equipos de gobierno del ayuntamiento y del Puerto, ambas administraciones públicas», y exigió «explicaciones por el incumplimiento del convenio», reclamando nuevas «soluciones» para los problemas hidráulicos de la zona.