El pleno del Ayuntamiento de Valencia ha aprobado hoy, con los únicos votos del PP, el Programa de Actuación Integrada (PAI) de gestión directa para el desarrollo de la zona verde del Parque Central.

La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, ha mostrado su satisfacción por que la aprobación de este plan supone "empezar el 40 % del Parque Central, muchos miles de metros cuadrados en el centro de la ciudad", en la zona de Russafa, y ha manifestado que el resto del proyecto estará "en los próximos años, sin duda alguna".

Barberá ha destacado que los valencianos y concretamente los vecinos de la zona "están suspirando" hace mucho tiempo por este proyecto, que ha costado mucho trabajo.

Ha recordado que "plantó cara" al Gobierno socialista en 1992 para que no dejara a Valencia fuera de la alta velocidad, para que no se hiciera la entrada ferroviaria "en zanja" sino soterrada y a que la zona fuera "un Manhattan" con "tanto aprovechamiento urbanístico".

Por eso la alcaldesa de Valencia se ha mostrado ante el pleno municipal "llena de satisfacción" porque "las 'cabotás' las pegaron otros, no yo".

La oposición ha votado en contra de la aprobación del PAI porque desvincula el plan del proyecto ferroviario, y su división en fases alarga los plazos de finalización.

El concejal del PSPV Vicent Sarriá ha dicho que no se trata de un plan urbanístico más sino de "la operación estratégica más importante para la ciudad desde el plan sur", en el que el PP "ha facilitado" al Gobierno central "el incumplimiento de sus compromisos".

El portavoz de Compromís, Joan Ribó, ha manifestado que se urbanizará la parte colindante al barrio de Ruzafa "pero de las vías, que fragmentan la ciudad, nada de nada", y el Ayuntamiento tendrá que pagar el 25 % a Valencia Parc Central, lo que supondrá una cantidad de 45,4 millones.

Según el concejal de EU Amadeu Sanchis, "el Gobierno central continúa sin el compromiso real para dar la financiación necesaria para tener acabado este gran proyecto urbanístico, y la propuesta de subdividir en fases retrasa el plan". Ello, a su juicio, alargará los plazos de finalización "poniendo en peligro el proyecto" y que los barrios al sur de la ciudad "acaben a su suerte".

El vicealcalde, Alfonso Grau, ha explicado que la única responsabilidad del Ayuntamiento en la financiación del proyecto es fijar unas cantidades en los presupuestos que no es "dinero finalista ni a fondo perdido" porque la sociedad Parc Central tendrá que devolver estos importes a las arcas públicas.

Grau ha añadido que la Generalitat ya ha aportado 57 de los 75 millones totales que abonará al proyecto y ha asegurado que la división en fases del proyecto obedece a "empezar lo antes posible para que el parque esté" a disposición de los vecinos, y ha acusado al PSOE de haber hecho una estación (la de Joaquín Sorolla) "megalómana" y "con prisas por inaugurarla antes de las elecciones".