«Un atentado al patrimonio de Benimaclet». Esa es la conclusión que extrae la asociación de vecinos de Benimaclet de la revisión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) al que han presentado alegaciones. De hecho, la fiesta prevista para conmemorar el aniversario de los huertos urbanos del barrio se ha convertido en un acto lúdico para protestar contra un planeamiento «que declara urbanizable huerta que está en plena producción y es uno de los últimos espacios agrarios del barrio». La cita será el próximo sábado, a las 11 horas, en la zona comunal de los huertos. El encuentro incluirá «arrós amb fesols i naps», actividades para niños y feria de intercambio de semillas con el objetivo de reivindicar el valor de la huerta y exigir su protección.

La entidad vecinal organizó una asamblea el pasado jueves para explicar las alegaciones presentadas que se centran en que la necesidad de nuevo suelo urbano «no está justificada» sobre todo si se tiene en cuenta «la superficie urbana del barrio que no ha sido construida ni tiene perspectivas de serlo». Además, los vecinos afirman en el escrito presentado al ayuntamiento que las nuevas autovías «no son soluciones a los problemas creados por el tráfico motorizado» ya que esta ciudad «precisa de un cambio en el modelo de movilidad urbana».

Y es que para la entidad vecinal la prioridad se centra ahora «en acabar la transición de Benimaclet con la huerta, pero no haciendo que la urbanización salte la ronda sino tratando adecuadamente el paisaje y los terrenos urbanos situados al este del barrio. Con ese objetivo la asociación de vecinos acaba de hacer pública la convocatoria del concurso de ideas».